Los bancos mexicanos restringieron los préstamos a los gobiernos estatales con mayor índice de endeudamiento dirigidos presuntamente por políticos acusados de corrupción, con el fin de evitar un nuevo colapso en el sector.
Lo anterior, se debe a que diversas entidades registraron un incremento en sus pasivos en los últimos cinco años derivados de:
- 11 préstamos por un monto de 8,471 millones de pesos (mdp)
- Veracruz, Chihuahua, Quintana Roo y Nuevo León contrataron casi la mitad de la deuda de todos los estados del país entre 2010 y 2015, es decir, se disparó en un 70% equivalentes a 536,269 mdp
Al respecto, un ejecutivo a cargo del préstamo a gobiernos locales en el Grupo Financiero Interacciones, Armando Acevedo, mencionó que "ahora tenemos políticas muy cautelosas para evitar casos de sobre endeudamiento"; sin embargo, la agencia Moody's rebajó su calificación en las notas del banco, mientras Standard & Poor's colocó en "negativa" la perspectiva crediticia.
Pese a ello, el gobierno argumentó “que no hay problemas en el sistema y que hay reglas más estrictas para contratación de deuda tras la aprobación en abril de una nueva ley para poner freno a la deuda de los estados”.
En ese sentido, la responsable de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas de la Secretaría de Hacienda, Marcela Andrade afirmó que las políticas permitieron visualizar un mayor análisis y transparencia de quien solicita el préstamo, así como una mayor atención en el grado de endeudamiento de las entidades, aportes federales, su exposición a los precios del crudo, y en los escándalos de corrupción de sus administraciones.
Por su parte, el presidente del Consejo de BBVA Bancomer, Luis Robles Miaja, comentó que los bancos no están dejando de prestar a clientes regionales, pero “lo que hemos hecho es que hemos sido prudentes en justamente a qué estados le estamos prestando".
De acuerdo con el Banco de México, entre diciembre de 2015 y junio de 2016 el total de préstamos de bancos comerciales entre estados y municipios se redujo 3.1% mientras que los préstamos al sector privado aumentaron 5.6%, por lo que la deuda estatal representa una pequeña parte del endeudamiento total del país.
Con información de Expansión