Muro para “sellar” la frontera, propuesto por el candidato del partido Republicano a la Presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, impactaría al medio ambiente en la región norte de América y tendría poco efecto en la disminución de flujos de migración no autorizados, concluyó un estudio.
Las propuestas de Trump, entre ellas el decomiso de remesas para pagar el muro representa un grave riesgo económico para América del Norte, pues orillaría a los inmigrantes no autorizados a “salir voluntariamente” de Estados Unidos lo cual implica mayores riesgos para ese país.
Además, cerraría el paso de la fauna e impediría el natural desarrollo de la flora de esa región. En cambio, tendría poco impacto en la disminución de los flujos de migración no autorizados, según un análisis realizado por el Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques, del Senado de la República (CEIGB).
Los expertos anticipan que se registraría un aumento de la informalidad en la economía estadounidense con el surgimiento de un mercado negro para el envío de remesas; a ello se agrega la pérdida de miles de empleos, y el descenso de la actividad económica en las comunidades de México que dependen directamente del envío de dichos recursos.
En cuanto a la advertencia de Trump de emprender deportaciones masivas, es calificada como “prácticamente imposible”, pues se requeriría de una inversión adicional de alrededor de 57,000 millones de dólares anuales al presupuesto destinado a las agencias de seguridad fronteriza. Aun así, el aumento de su personal sería insuficiente.
De acuerdo a un reporte de 2013 del Woodrow Wilson Center for Scholars, aún cuando la Patrulla Fronteriza estadounidense incrementó su personal en más de 500%, el número de aprensiones por parte de este cuerpo de seguridad ha disminuido considerablemente en la última década.