México (Notimex).- El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) aseguró que no hay indicios de que México enfrentará una crisis financiera pese a que la economía continua con un ritmo bajo de crecimiento y una precarización en el mercado laboral, reflejada en bajos salarios y altos niveles de informalidad y subocupación.
En ese sentido, la posibilidad de reducir la deducibilidad de las prestaciones para los trabajadores aplicado por las empresas, podría mermar aún más la situación de los hogares, debido a que “eleva los costos de contratación y reduce la capacidad de generar nuevos empleos, lo que puede afectar el nivel de salarios que se ofrecen ante una reducción de demanda de mano de obra”.
En el reporte del “Análisis económico ejecutivo”, el organismo consideró que cumplir los objetivos de reducción de gasto es fundamental para fortalecer la estabilidad macroeconómica del país; así como establecer una asignación más eficiente de los recursos, especialmente en inversión en infraestructura.