Los mexicanos en Estados Unidos enviaron más dinero a casa y a un mayor ritmo, en parte debido a que el presidente Trump podría iniciar las restricciones a las transferencias de capital.
Las remesas, transferencias de efectivo entre el país norteamericano y México, aumentaron 6.3% en enero, en comparación con hace un año. Eso es equivalente a 2,000 millones de dólares, de acuerdo con estadísticas publicadas por el Banco de México.
Las cifras de enero reflejan una tendencia creciente. Para todo 2016, las remesas aumentaron 8.8% anual. El año anterior, las remesas solo se incrementaron 4.8% en comparación al año previo. Los economistas dicen que existen dos razones principales para el alza en el número de dólares que vuelan al sur de la frontera.
Primero, Trump amenazó con fiscalizar o detener el flujo de remesas a México para poder pagar su muro fronterizo. Los mexicanos podrían intentar enviar el dinero a casa antes que Trump detenga las transferencias.
"Es una anticipación estratégica de restricciones potenciales”, dijo Alberto Ramos, director de investigación sobre Latinoamérica en Goldman Sachs. La idea es: “déjame enviarlo ahora antes de que lo fiscalicen”.
En segundo lugar, el valor de la divisa mexicana se encuentra casi en un mínimo histórico. Los mexicanos en Estados Unidos que ganan en dólares pueden tomar ventaja de la tasa de cambio y los parientes en casa obtendrán más pesos si la divisa sigue debilitándose.
Las remesas no son morralla. El año pasado, los mexicanos enviaron 27,000 millones de dólares, una cifra récord. México obtuvo más dinero en remesas de lo que ganó por la exportación de petróleo (18,700 millones de dólares). Son una fuente vital de ingresos para millones de familias mexicanas de bajos ingresos.
Las amenazas de Trump contra las remesas ocurrieron durante su campaña. Desde que asumió su puesto no ha mencionado el asunto.
Con información de Expansión