Nayarit, el Estado de México y Coahuila son los estados del país que contarán con elecciones este año para nuevo gobernador, pero su situación actual es un tanto problemática: tienen ingresos locales menores y líos con el endeudamiento, lo que a su vez provocó altos niveles de pobreza y violencia, de acuerdo con el investigador Kristobal Miguel Meléndez del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
En cuanto a la recaudación local, que es importante para tener recursos propios y depender menos de las transferencias federales, tanto el Estado de México como Nayarit tuvieron retrocesos en la recaudación local de 2010 a 2015, por lo que cada vez dependen más de los recursos federales.
Sobre el nivel de participaciones y aportaciones, Nayarit lo mantuvo por debajo del promedio nacional además que disminuyó su recaudación local. Esto ha contribuido a que la entidad federativa mantenga altos niveles de endeudamiento con altas tasas de interés.
Sin embargo, tuvo efectos considerables en su contexto social porque sus niveles de violencia disminuyeron en más del 50% e incrementó su ingreso laboral con menores niveles de desigualdad.
En contraparte, el Estado de México ha incrementado su nivel de participaciones por encima del promedio nacional de 2011 a 2017, lo que le ha ayudado a disminuir su nivel de endeudamiento.
Su nivel de aportaciones aumentó por debajo del promedio nacional y sus ingresos locales han disminuido de 2010 a 2015, por lo que ha tenido un impacto social en cuanto a mayores niveles de pobreza y de homicidios dolosos, así como menor ingreso laboral.
Tan solo el nivel de homicidios dolosos incrementó 78.1% de 2010 a 2016 en el Estado de México. En cambio, en el mismo periodo de tiempo, disminuyó considerablemente en Nayarit (89.4%) y en Coahuila (44.5%). Por otro lado, a pesar de que el total del número de delitos disminuyó 6.8% a nivel nacional en los últimos seis años, tuvo un repunte del 2.9% en Coahuila.
En ese sentido, Coahuila casi triplicó su nivel de endeudamiento de 2010 a 2016 con una mayor tasa de interés. Su nivel de participaciones y aportaciones creció a menor ritmo que el promedio nacional de 2011 a 2017.
Su recaudación local incrementó a un mayor ritmo que el promedio nacional de 2010 a 2015, dando recursos extras a la entidad federativa. Los niveles de pobreza, desigualdad y del total de delitos se han incrementado desde 2010.
Coahuila que tenía un endeudamiento del 2% del PIB en 2010, que era inferior al promedio nacional (2.5% del PIB), para 2016, su endeudamiento (5.9% del PIB) ya era más del doble del promedio nacional (2.8% del PIB).
Dicho endeudamiento representa el 278.5% de sus participaciones
El Estado de México, por su parte, ha reducido su nivel de endeudamiento a 2.2% del PIB en 2016. Nayarit ha mantenido niveles altos de endeudamiento por encima del 4% del PIB en los últimos seis años.