¿En verdad sirve ergonomía en el ámbito laboral?

La relación del hombre con su medio de trabajo incide directamente en su calidad de vida y por ende, en la productividad de la empresa; de ahí que sea importante cuidar la interacción del trabajador con todo aquello que interfiera en la prestación de sus servicios.

De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), para promover y mantener el bienestar físico, psíquico y social de los trabajadores, se debe adaptar el trabajo al hombre y este a su labor.

Para ello es importante conocer las habilidades humanas, sus limitaciones y características; porque así se facilita el diseño de las herramientas, las máquinas, los sistemas, las tareas, las actividades y los ambientes confortables para el empleado.

La ergonomía abarca dos aspectos fundamentales: los elementos físicos del trabajo y las capacidades humanas de los trabajadores, así se pueden señalar los siguientes objetivos de esta disciplina:

• reducción de lesiones y enfermedades de trabajo
• disminución de los costos por incapacidades de los trabajadores
• aumento de la producción
• mejoramiento de la calidad del trabajo
• disminución del ausentismo
• aplicación de las normas existentes, y
• disminución de la pérdida de materia prima

Para alcanzar los objetivos descritos, deben emplearse métodos que atiendan a las características físicas de las tareas a realizar en el centro laboral, así como a las ambientales bajo las cuales se desarrollan dichas actividades, ya que influyen directamente en la salud del trabajador ocasionándole daños que además de perturbarlo, afectan en la productividad de la empresa para la cual trabaja.

Por lo anterior, es recomendable:

• detectar los riesgos inherentes al puesto de trabajo
• implementar mejores controles de ingeniería y administrativos para disminuir las condiciones de riesgos identificadas, y
• educar a los supervisores y trabajadores a fin de prevenir dichos riesgos

Como se aprecia aplicar la ergonomía en los centros de trabajo es una inversión que les garantiza a los empresarios  una mejor productividad y coadyuva al bienestar y desarrollo de los trabajadores en general.