A pesar de que la ocupación de las mujeres avanza cada vez más, solo 23 millones de las 52 millones de mujeres en edad de trabajar son económicamente activas y de ellas solo 10 millones están ocupadas en el sector formal, destacó la cofundadora de Worky Maya Dadoo.
"Hay un gran porcentaje de mujeres trabajando, pero este porcentaje está muy inclinad hacia la informalidad, de acuerdo a las nuevas regulaciones que estamos viendo sobre aquellas trabajadoras domesticas, ya se está contribuyendo a su formalidad, pero hay un gran movimiento que aún podemos y tenemos que hacer que es, ¿cómo formalizamos a la mujer?", destacó.
Por otro lado, indicó que la disparidad de ingresos también es un fenomeno alarmante, pues del universo de personas que ganan 21,000 pesos, solo el 29% son mujeres y ellas representan solo el 5% de quiénes logran ganar más que eso.
La respuesta está en la cultura del desarrollo
Durante el evento Impulsando la equidad de género en México, las mejores prácticas para lograrlo, los panelistas indicaron que una de las claves para lograr que más mujeres formen parte las organizaciones, especialmente en puestos directivos y aprovechar los beneficios de ello, lo más importante es cambiar la cultura.
En ese sentido, el CEO de True Growth, Fernando Trueba, indicó que este tema tiene que empezar en casa, es decir, los padres tienen que tener mucho cuidado en enviar mensajes a sus hijas sobre sus capacidades e impulsarlas a explorar nuevas profesiones y empoderarlas.
No obstante, aclaró, las organizaciones también tienen mucho que hacer, de inicio, entender que para llegar a más clientes y crecer, es indispensable tener distintas perspectivas, especialmente la femenina, pues está comprobado que en Latinoamérica, la decisión de compra, en su mayoría depende de las mujeres.
Por otro lado, resaltó evitar solicitar fotografía en los currículums, e incluso la universidad a la que asistieron e intereses personales, para eliminar el sesgo inconsciente.
"Si tu ves un currículum y es la persona que fue a la misma universidad que tu, estudió lo mismo que tú, le gustan las mismas cosas que a ti, tienes una mayor empatía, tienes una mucho mayor probabilidad de escoger a esa persona para la posición", detalló Trueba.
Además resaltó que eliminar códigos de vestimenta y uniformes también ayudan a que sin importar el género los colaboradores estén en igual condición de desarrollo.