El teletrabajo, aunque tiene numerosas ventajas, ha significado todo un reto para las organizaciones y sus empleados, pues hay empresas que no han terminado de entender que las dinámicas de trabajo a distancia deben ser diferentes a las que se realizan de manera presencial, y en este caso, más que nunca, se requiere de la tecnología como aliada.
Al respecto, David Sandoval, gerente regional de la compañía de innovación y accesibilidad en videoconferencias DTEN para América Latina, aseguro que “los escenarios virtuales requieren de dinámicas distintas a las presenciales. Hablamos de que los trabajadores remotos deben valerse de herramientas y tecnologías que les permitan trabajar de manera más cómoda y eficiente”.
En ese sentido, el informe “Desafíos y Oportunidades del Teletrabajo en América Latina y el Caribe, Serie Panorama Laboral en América Latina y el Caribe 2021” de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), explicó que una cultura organizativa correctamente planteada con tecnología, permite generar mayores ganancias de productividad en las compañías.
Por ello, DTEN compartió que la clave para lograr que el home office sea más productivo es garantizar la comunicación entre los colaboradores remotos, sobre todo aquellas empresas que cuentan con muchos empleados que laboran en la modalidad de teletrabajo, para ello se requiere de una comunicación mediante mensajes de texto, correos electrónicos y videoconferencias.
Además, es necesario trabajar con las herramientas adecuadas que optimicen el trabajo remoto e impulsen la productividad, de manera que los empleados mantengan organizadas sus tareas diarias con soluciones tecnológicas que den transparencia a las actividades y permitan identificar en qué está enfocada cada persona del equipo.
DTEN también recomendó motivar de forma constante a los equipos mediante incentivos emocionales y económicos que satisfagan sus necesidades personales, familiares y profesionales, por ejemplo, otorgando permisos en fechas especiales, horarios flexibles, bonificaciones por cumplimiento de objetivos, primas anuales, planes de financiación, etc.
Finalmente, se recomienda priorizar la salud mental del equipo, permitiendo y generando espacios de interacción humana aun a la distancia, reuniéndose, por ejemplo, una vez al mes para tomar un café, celebrar una fecha especial o platicar de lo que sea, menos de trabajo.
