La pandemia transformó drásticamente el entorno laboral y esto no tiene necesariamente que estar fundamentado en la tecnología. La tendencia de hoy es que los trabajadores estén más empoderados para decidir quiénes los representan mediante un sindicato y hay mayor necesidad de políticas de bienestar.
"Hoy entendemos que las dos tendencia que se vienen con todo este tema de los trabajos del futuro no necesariamente están ligadas al teletrabajo. Entendemos que va a haber un transformación digital que se está dando ya, que muchos de los trabajos que van a desaparecer se transformarán en trabajos que no existen y que tienen que ver mucho con el tema digital, pero también entendemos que hay una gran necesidad dentro de la población que tiene que ver con el humanismo", destacó el director de vicerrectoría de empresas de Universidad Tecmilenio, Julio Peña.
Al respecto, el director general de Amedirh, Mauricio Reynoso, explicó que este cambio viene de la mano de la reforma laboral y diversas obligaciones y compromisos internacionales asumidos por México.
Refirió, por ejemplo, que el tema de la regularización del outsourcing ya ni siquiera forma parte de la agenda, a pesar de que en su momento fue un vehículo para operar en medio de nuevas necesidades laborales. Pero hoy el tema principal es el bienestar físico, laboral, emocional y financiero.
"Entendiendo que la relación entre los empleados y colaboradores tiene que cambiar, para enfocarse cada vez más en el ser humano y en la justicia laboral, es sumamente relevante que las organizaciones pongan especial atención en el bienestar de la gente, ya que puede ser el primer punto de partida para evolucionar a una mejor propuesta de valor con resultados positivos para toda la organización", subrayó.
¿Formar a los líderes humanos?
De acuerdo con Reynoso es justo el contexto lo que nos orilla a buscar un medio que fortalezca las capacidades de las personas, los supervisores, los líderes y que todos entendamos dónde estamos metidos en el mundo laboral y que todos podamos colaborar y sumar.
En ese sentido, destacó que es de suma importancia que “invirtamos tiempo, dinero y esfuerzo en cada vez ser mejores en todos los aspectos”.
El directivo de Amedirh reiteró, en ese aspecto, que se debe capacitar a los líderes para atender de manera asertiva y eficiente la implementación de esta nueva normalidad.
Tanto Peña como Reynoso, coincidieron en que es indispensable la formación de los líderes en el desarrollo de competencias diferenciadas que fortalezcan a las organizaciones en la transición al entorno laboral actual.
El director de Tecmilenio subrayó que “la transformación laboral requiere un replanteamiento de las estructuras tradicionales en torno a los trabajadores” y la responsabilidad recae en los empleadores.