Cómo evitar la renuncia silenciosa

Si uno está apasionado por su trabajo, no se presentan actitudes de renuncia silenciosa

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 .  (Foto: iStock)

La “renuncia silenciosa” no es un término nuevo en el mundo laboral pero actualmente sí es innovador en la consciencia de las personas y puede generar problemas en la operación de las organizaciones e incluso pérdidas económicas. 

Al respecto, Grupo Adecco explicó que además de manifestarse como una situación donde un trabajador sufre de una insatisfacción, cansancio físico o emocional, la tendencia también está asociada al nivel de entusiasmo y el gusto que se le destina al ámbito profesional. 

Esta situación, agregó, recientemente la “renuncia silenciosa” ha cobrado relevancia, según el World Economic Forum El "Quiet quit", o renuncia silenciosa, se relaciona a cumplir con los deberes en el trabajo, pero no estar dispuesto a ir más allá, el término puede asociarse a los trabajadores más jóvenes, pero al parecer fue utilizado por primera vez por un estadounidense de la generación X. De acuerdo con este organismo, el hashtag #QuietQuitting ha acumulado ya más de 17 millones de visitas en TikTok y artículos de prensa de todo el mundo han utilizado el término y el ruido se ha extendido a otras redes sociales.

“La renuncia silenciosa no siempre se manifiesta cuando una persona lleva un determinado tiempo en la empresa o porque hace cierta cantidad de trabajo. La actitud se puede interpretar de distintas maneras, incluso se puede identificar dentro de los primeros 10 días de estancia, uno se puede dar cuenta si un trabajador de cierta forma va a tener una relación duradera o temporal en la empresa. El lenguaje no verbal y físico son los primeros indicios que ayudan a diferenciar si es motivo de desgaste o desmotivación”, comenta Alberto Del Castillo Head of Service de Grupo Adecco México.

El sentir emocional de una persona es un factor que no se identifica a simple vista, es necesario un análisis constante del colaborador. “En ocasiones, se confunde el mal manejo de la inteligencia emocional por causas personales y se traduce en falta de empatía, colaboración o trabajo en equipo, es importante conocer esta diferencia y tener una evaluación constante”, puntualiza Alberto Del Castillo. 

Para poder identificar y saber manejar estas actitudes en el ambiente laboral se sugieren considerar los siguientes criterios: 

  • entender las necesidades de las generaciones, a diferencia de otros años, la gente aprendía a vivir con burnout, hoy en día la gente ha aprendido a identificar el cansancio y la generación Z, por ejemplo, ya no está dispuesta a trabajar como lo hacía la generación “X” y los “Boomers” que antes podían continuar trabajando a pesar del cansancio
  • cambio constante por más opciones de trabajo, gracias a la tecnología hay herramientas y modalidades que ahora ofrecen más opciones en el mundo laboral, que pueden dar cabida a cambiar de un trabajo sin tanta complejidad a diferencia de otras generaciones donde era más difícil buscar un empleo
  • lo que no es medible no es mejorable, las cosas difícilmente van a cambiar si no se logra incorporar indicadores de desempeño profesional que tienen el liderazgo sobre la gente con objetivos de organización y desarrollo. Evaluar el sentir de los colaboradores puede hacer la diferencia para identificar qué acciones deben efectuarse para que pueda haber un cambio y evitar conductas de renuncia silenciosa.

“Si uno está apasionado por su trabajo, no se presentan actitudes de renuncia silenciosa. Donde hay plenitud, motivación y realización, tanto la empresa y el colaborador tienen muchas posibilidades de convertirse en oportunidades de crecimiento, desarrollo y mejora”, recalcó Del Castillo.