Las Pequeñas y Medianas Empresas son las principales responsables de dar y mantener empleo en el país, por lo que necesitan de políticas públicas que las ayuden a crecer y permanecer en el mercado, dado que, en últimas cerraron sus puertas alrededor de 400,000 de ellas, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Aseveró que las cifras sugieren que las PyMES retoman un impulso en el empleo y que éste debería ser apoyado por las políticas públicas.
"Lo importante es que estos emprendimientos puedan, primero, ser abiertos a bajo costo. Dos, que subsistan sin cerrar y, tercero, que crezcan a fin de ganar productividad", puntualizó
Refirió que información sobre el número de empresas “unicornio” en México indica que hay la capacidad empresarial y que estos pasos han sido posibles para esas empresas exitosas. Pero es necesario que sean más accesibles para otros.
Para ello se requiere -y urgentemente- racionalizar las regulaciones existentes en los tres niveles de gobierno que encarecen el emprendimiento y la formalización.
Asimismo, es necesario apoyar a las empresas, con una visión hacia su crecimiento, en áreas como capacitación, asesoría técnica, información de sus mercados potenciales -internos y de sustitución de importaciones-, acceso al crédito de largo plazo y factoraje a bajo costo, entre otras.
"El apoyo requerido no se trata de subsidios o elección de sectores prioritarios, sino de facilitación", recalcó.
Aspectos clave para el éxito de las PyMES son también la oferta de energía segura a lo largo del país -generación, sí, pero también transmisión y distribución- y de infraestructura de transporte segura y barata -combate a los robos, la extorsión y mejores carreteras, por ejemplo-.
El papel de la política de comercio interior y de la banca de desarrollo es clave para muchos de los apoyos requeridos para la subsistencia y crecimiento de las PyMES. Pero también lo es la participación de autoridades de los sectores de Energía, Comunicaciones y Transportes y Seguridad Pública.