Las y los pequeños pueden darnos grandes enseñanzas que podemos implementar en la vida diaria
Los niños pueden enseñarnos más de lo que creemos, y es que pese a su corta edad y vivencias, es precisamente esa una ventaja que tienen si hablamos de habilidades, un ejemplo que todos los adultos deberían tomar en cuenta y reaprender para aplicar en su trabajo y a lo largo de toda su vida laboral.
Al respecto, la plataforma de aprendizaje y formación online, Udemy, señaló que en ocasiones, la vida de adulto contiene tantas responsabilidades y preocupaciones que hacen se dejen de lado las habilidades aprendidas desde niños, las cuales pueden ser clave para impulsar la trayectoria profesional, pero ¿cómo volver a adquirirlas?
De acuerdo con la plataforma, hay por lo menos cinco habilidades que todos los adultos pueden volver a aprender y aplicar a su vida laboral para tener carreras más exitosas:
- curiosidad: las personas son curiosas de forma innata, pero conforme crecen pierden la necesidad de cuestionar todo, por ello es necesario recuperar la curiosidad en el trabajo, ya que permite tener mayor interés en lo que nos rodea uy así profundizar en ciertos aspectos mediante la adquisición de nuevos conocimientos
- experimentar: es necesario volver a probar cosas nuevas, cometer errores y volver a intentarlo una y otra vez, no siempre conviene irse por el lado seguro, de acuerdo con Udemy, es necesario perder el “miedo al fracaso” y al qué dirán, esto permite encontrar mejores soluciones y oportunidades
- tenacidad: la persistencia de los niños es un gran ejemplo, ya que vemos como se esfuerzan en el proceso para conseguirlo, para volver a adquirir la habilidad, hay que buscar soluciones alternativas para no rendirse y mantener el entusiasmo en cualquier tarea que se realice
- creatividad: aunque los niños siguen instrucciones, también tienen la habilidad de encontrar nuevas formas de hacer las cosas, por eso hay que permitirse imaginar sin miedos ni prejuicios, justo como dicen muchos, “pensar fuera de la caja”
- aprendizaje a través del juego: el ser adulto no significa que ya no se puedan divertir, por eso tienen que seguir el ejemplo de los niños y jugar para aprender, forjar vínculos con otras personas, compartir, negociar y resolver conflictos, esto puede traer consigo grandes beneficios a nivel personal y como organización
