Aunque cada vez hay mayores oportunidades en el mercado laboral, la baja incorporación de los hombres en el trabajo doméstico y tareas de cuidados ha implicado una sobrecarga para ellas, indicó un estudio realizado por la empresa tecnológica de creación de herramientas, servicios y propuestas del capital humano, Buk.
El informe “Radiografía de las Mujeres en el Trabajo 2023” destacó que al menos el 31% de las mujeres destinan más de 10 horas al trabajo doméstico mientras que en los hombres el porcentaje apenas alcanza un 18%, y a medida que ellas asumen cargos de más responsabilidad en las empresas también aumenta su carga de trabajo doméstico, pero en los varones no pasa igual.
Todo esto tiene un impacto tanto físico como emocional en las mujeres que les impide un máximo desarrollo profesional y un agotamiento que deriva en altos niveles de Burnout o estrés laboral crónico, que en palabras de la psicóloga de Terapify México, Daniela Vieyra, las principales características y/o hábitos que provocan este padecimiento son:
- falta de herramientas para priorizar el trabajo
- no poder delegar tareas
- poco equilibrio entre el trabajo y la vida personal
- búsqueda de perfeccionismo
- miedo a equivocarse
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Agotamiento laboral, ¿un problema de género?
El reporte “¿Cómo prevenir un incendio en las organizaciones?“ de Buk, publicado en junio de 2023, realizó un sondeo en 4 países (Chile, Colombia, Perú y México) en el que más de 4 mil personas accedieron entre abril y mayo de 2023 para hablar sobre la situación del Burnout, y un dato que llamó la atención es que el agotamiento es más común en mujeres que en hombres.
El informe indicó que aunque el 67% de los hombres se sienten emocionalmente agotados por el trabajo “más de una vez al mes”, en las mujeres el índice es del 65%, sin embargo, en otros factores el porcentaje se invierte, el 48% de ellas siente que pierde el control por todas las actividades que tiene que realizar respecto al 42% de los hombres.
Asimismo, 32% de las mujeres siente un nudo en el estómago de solo pensar en que tiene que ir al trabajo, en contraste con el 25% de los hombres y el 31% de las mujeres siente que le salta el párpado o tirita el ojo de forma descontrolada por el estrés, mientras que esto le pasa solo al 25% de los hombres.
No obstante, más allá del género, el mercado laboral se enfrenta a otro problema, la falta de motivación, y es que la generación Z “son quienes están menos motivados con sus trabajos”, señaló el estudio que resaltó, por lo menos el 42% de los menores de 30 años muestran bajo entusiasmo en su empleo, en contraste con solo el 5% de los mayores de 50 años que presenta síntomas de Burnout.
En el caso puntual de México, el 52% de los mexicanos se sienten medianamente comprometidos con su trabajo, 35% se sienten comprometidos y al menos un 13% tienen síntomas de Burnout, lo cual también impacta en el tema del reclutamiento, y es que Buk reveló que el 77% de los empresarios tienen dificultades para encontrar personal calificado.
¿Cómo crear lugares de trabajo libres de agotamiento?
La People Happiness Manager de Buk, Estela Martínez, dijo que es necesario que las empresas generen estrategias que permitan enfrentar los retos de los trabajadores, así como apoyar a los líderes para “aprovechar al máximo las oportunidades que surjan” y así crear lugares de trabajo “más felices” a través del bienestar laboral.
En un comunicado fechado al 28 de enero de 2024, la experta enfatizó en que para priorizar el bienestar de los colaboradores, es necesario implementar beneficios y modelos compartidos entre la persona y la organización, ya que a una compañía le puede costar más de 6 meses recuperar a un colaborador que se fue.
Por su parte, la Directora del Instituto del Bienestar y Felicidad, Lorena Zamora, reconoció que el agotamiento es producto del “desbalance entre las demandas de una persona y sus recursos”, pero reducir el estrés puede ser la clave para sobreponerse, esto implica realizar un diagnóstico organizacional para elaborar planes de acción específicos.
En el caso de las mujeres, que son quienes más se enfrentan al problema del agotamiento, se requieren “acciones o políticas organizacionales que apunten a una mejor conciliación”, ya sea con modalidades y horarios de trabajo más flexibles, así como políticas de compensación como el salario emocional que atienda la psicoeducación y brinde herramientas y técnicas de autocuidado.
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