En ocasiones no se valora adecuadamente a la comunicación y se da por sentado que si las personas saben expresarse, también conocen cómo relacionarse; pero, lamentablemente no siempre es así y sería un error seguir asumiendo esto.
Descubrir qué es la comunicación asertiva, aprender a fomentarla y practicarla, ayuda a mejorar el clima laboral de los centros de trabajo, y a coadyuvar con el desarrollo de los subordinados, desde un ambiente de confianza, honestidad y respeto.
A continuación, la licenciada Karina López Salazar, quien es psicoterapeuta clínica y del bienestar emocional, consultora en psicología organizacional, nos comparte cómo pueden los empleadores fomentar la comunicación asertiva dentro de las empresas.
Importancia de la comunicación asertiva
Uno de los problemas en las organizaciones radica en el uso incorrecto de la comunicación; es decir, en la forma en que un individuo dice o interpreta lo que ocurre en su entorno, lo cual genera problemas, malentendidos, diferencias o situaciones que lo ponen en circunstancias complicadas.
Por ello, aprender a tener una adecuada comunicación se convierte en algo imperativo dentro de las empresas, a todos los niveles.
Se ha comprobado que una de las herramientas más eficaces para evitar que las cosas se salgan de control está en aprender a comunicarse asertivamente, pero ¿a qué se refiere esto?
Este estilo de comunicación es aquel en el cual la persona es la principal responsable de transmitir claramente sus pensamientos, ideas, sentimientos, emociones, necesidades, requerimientos, etc., buscando que la información que se proporcione sea directa, respetuosa, sin caer en las agresiones, insinuaciones, o violencia, pero al mismo tiempo sin someterse a los demás por complacer, ceder, miedo o intimidación.
Con este tipo de comunicación se busca mantener un equilibrio entre los derechos de las personas por medio de acciones que ayuden a promover relaciones sanas y efectivas.
Dentro de un entorno laboral, la comunicación asertiva juega un papel fundamental al momento de dar indicaciones a los colaboradores, pero también para poder aceptar o rechazar las solicitudes, comprendiendo que todo debe hacerse desde la objetividad y el respeto.
Por ello, es esencial que lo expresado sea claro y refleje exactamente lo que se desea que la otra persona entienda. Del mismo modo, las preguntas deben ser precisas y enfocadas en lo que realmente se necesita transmitir. Con esto se evitan las interpretaciones o la información incompleta que llevan por un camino erróneo.
Descifrar la información no es un error, pero debe considerarse que ello es subjetivo, porque depende del medio de comunicación que se ocupe y del estado de ánimo de la persona receptora, que interfiera en lo que se quiere trasmitir, y genere interpretaciones, suposiciones o creencias que causen un malentendido, una situación de conflicto o errores. Esta es la parte medular de la importancia de una correcta comunicación: prevenir cualquier tipo de situación que no sea en realidad aquello que se quiere alcanzar.
Barreras en la comunicación asertiva
La implementación de una comunicación asertiva encuentra obstáculos que complican que se ejecute correctamente. Para poder identificar las barreras que se presentan, es importante aclarar si estas son internas o externas; esto es, porque existen factores que intervienen, como el emisor, el receptor, el mensaje, el entorno y el contexto.
Aunque no se puede tener control de todo, si se tiene una comunicación asertiva, es probable prevenir los principales factores que ponen en riesgo un correcto entendimiento.
Limitante internas
Dentro de las limitantes internas se encuentran:
- miedo al conflicto: es común (pero no por eso positivo) poder observar que en los centros de trabajo se acepten solicitudes que rebasan los límites personales del colaborador por temor al conflicto o a ocasionar una situación complicada; por ende, el trabajador termina cediendo y haciendo cosas con las que no está de acuerdo, solo por el pánico a que al expresar sus verdaderos sentimientos y necesidades, estos sean invalidados y causen un “problema”
- falta de confianza en uno mismo: se cree que la autoestima o el amor propio de una persona no debe influir en la comunicación o en el desarrollo de sus actividades, pero no debe olvidarse que se trabaja con capital humano, y lo que le afecte internamente a cada individuo impacta directamente en sus acciones. Por lo tanto, no tener confianza en uno mismo, o en su criterio mermará la libertad y confianza de expresar con asertividad sus emociones o sentimientos
- creencias limitantes: son ideas que llevan al individuo a no expresarse o hacer cosas por no merecerlas. Esto obstaculiza la comunicación asertiva y refleja pensamientos como: “si pienso en mí eso me hace egoísta”, “debo agradar a todos”, “si no hago lo que me dicen no seré aceptado”, etc.
- falta de habilidades de comunicación: la diferencia principal entre los seres humanos y los animales radica en la virtud de poder comunicarse. De ahí que, desde pequeños nos enseñan a conversar, escribir o expresarnos con el cuerpo, por ello, si no se cuenta con las herramientas y el conocimiento adecuado de comunicación se genera limitante para poder hacerlo asertivamente, y
- miedo al rechazo o a la crítica: sentirse en estado de vulnerabilidad o pensar en ser rechazados o expuestos puede llevar a una persona a guardar silencio para no sentirse en esa situación
Limitantes externas
Además de lo anterior, debe ponerse atención a las barreras externas, entre las que se encuentran:
- ambiente hostil o poco receptivo: estar en un lugar donde se siente que no se valora la opinión de las personas y donde la comunicación no es abierta y honesta
- falta de apoyo o de confianza: cuando no se cuenta con la tranquilidad para expresar lo que se siente, porque quizá ha existido el antecedente de la invalidación
- modelos de comunicación disfuncionales: trabajar en sitios donde se acostumbra una comunicación pasiva o agresiva provoca que no se desarrollen las habilidades correctas de comunicación, sea para implementación o adaptación, y
- estrés: el agotamiento afecta la capacidad de una persona para poder expresarse sus ideas clara y tranquilamente
Identificar, comprender y aceptar las dificultades que existen son de los primeros pasos para ejecutar o evaluar las condiciones internas y externas, determinando si son apropiadas para desarrollar una adecuada comunicación o incluso poder validar las áreas de oportunidad que deben atenderse en primera instancia para la implementación de un cambio, el cual tiene que ser de raíz; es decir, desde la parte más alta y central de los centros de trabajo, para replicar con base en el ejemplo, la reciprocidad y la congruencia.
Principales puntos para desarrollar habilidades de comunicación asertiva
Que una persona se encuentre en un lugar donde se fomenta una comunicación abierta, clara y respetuosa ayuda a una empresa, porque se verán favorecidas las relaciones personales y profesionales, dando pie al deseo de desarrollarse en un ambiente de respeto y colaboración.
La biología y la historia nos han enseñado que en un ambiente hostil, un ser vivo no puede ni busca reproducirse, lo mismo sucede cuando una persona se encuentra en un entorno desfavorable, por lo que empieza a desarrollar herramientas de “defensa”, al sentirse en constante amenaza, en lugar de desarrollar todo su potencial.
De ahí que, para tener un adecuado desarrollo de las habilidades básicas de comunicación asertiva, en la infografía de abajo se señalan algunos aspectos a considerar.
¿Cómo aplicar la comunicación asertiva en el centro de trabajo?
Para aplicar los principios de comunicación asertiva en las organizaciones laborales, es necesario conocerlos y comprenderlos con claridad, porque la mejor forma de fomentarlos será con el ejemplo y con la enseñanza de estos.
Cuando empecemos a comunicarnos de manera asertiva se deberá tener en cuenta que hay tres fases que debemos pasar:
El camino para ejecutar una adecuada comunicación asertiva, no es sencillo, porque requiere conocimiento, enseñanza, refuerzo y repetición, por lo que existen algunas actividades que la impulsan desde los líderes, para que sean un parteaguas que ayude a replicar lo aprendido a través de la enseñanza y el ejemplo.
Algunas medidas a aplicar son:
- practicar técnicas de comunicación, en donde podemos empezar a desarrollar estrategias con las cuales se fomente y ejercite una adecuada comunicación. Por ejemplo, role playing, invirtiendo papeles para estimular la empatía a través de preguntas como: ¿qué harías si fueras el líder de tal persona y le quisieras pedir una actividad particular?, ¿cómo expresarías que no puedes hacer la tarea encomendada?, etc.
Con ello, se da un feedback no de una sola vía, sino solicitar, aceptar y dar retroalimentación sobre los estilos de comunicación que se han empleado para establecer una mejora continua
- educación y capacitación, para generar un cambio hay que empezar a deconstruir ideas que se pueden tener arraigadas, por lo que, los talleres, cursos y lecturas que amplíen el conocimiento de las personas, pueden ser una gran herramienta, y
- enseñanza de técnicas de relajación y gestión emocional, una de las emociones más complicadas de trabajar y gestionar es el enojo, al ser una emoción impulsiva es muy difícil que sea dosificada, mas no es imposible. Ayudar a los colaboradores y líderes a aprender sobre gestión emocional, relajación y desarrollo humano es importante para poder fomentar un ambiente de cambio
Estas son algunas estrategias y técnicas que sirven de auxilio; sin embargo, es importante recalcar que la mejor forma de lograr un éxito en lo que se plantea es a través del uso constante de lo aprendido, practicar una y otra vez como si se estuviera formando un hábito, pues solo a partir de la práctica se podrán detectar áreas de oportunidad y se podrá mejorar en ellas.
Esto beneficiará el entorno laboral y también el contexto personal de los colaboradores, pues no debe perderse de vista que cada una de las personas que forman parte de la organización tienen un valor enorme; consecuentemente, se debe de cuidar que el ambiente sea el óptimo para fomentar el desarrollo de los empleados y el de la empresa.
Conclusión
Se tiene que usar la comunicación asertiva en todo momento, como acción preventiva, no solo en los “problemas”, sino precisamente para evitar que estas circunstancias ocurran.
Dentro de las organizaciones laboran personas que son un cúmulo de experiencias, vivencias, emociones, educación, creencias y estilos de crianza, que no es deber del empleador sanar, pero esto no puede pasarse por alto, porque impacta en el desarrollo de la empresa; por ende, es necesario tener las bases sólidas con valores adecuados para que los trabajadores que forman parte de la organización se adapten, se involucren y crezcan.
El ser humano es un ser social y una de sus principales cualidades es la capacidad de comunicarse, pero es momento de incentivar que esta sea asertiva, para fomentar la evolución y con ello, la organización prosperará.
* Nota del editor: Las opiniones vertidas por el especialista no necesariamente reflejan la ideología de la publicación
