Colaboración del doctor Juan Antonio Legaspi Velasco, miembro de número de la Academia Nacional de Medicina del Trabajo, y connotado especialista en materia de seguridad e higiene.
Antecedentes
La seguridad industrial parece tener su aparición a partir de la Revolución Industrial, los antecedentes que existen sólo refieren intentos aislados de protección para el trabajador, sobre todo en el cuidado de las líneas de producción.
En sus inicios, los pioneros de la seguridad, realizaron una acción lenta y difícil encaminada a cambiar la idea que se tenía del trabajador, para considerarlo parte integral del proceso de producción y no sólo como un recurso al que se debe proteger y motivar; lo cual hoy es la parte esencial y dinámica de la unidad productiva.
Objetivo
De igual modo el concepto de seguridad industrial, abarca hoy todos los esfuerzos que se hacen para tener centros de trabajo seguros y saludables, no importando la actividad económica del mismo, aunque se enfoca primordialmente a la prevención de accidentes de trabajo.
Problemas de seguridad en los centros de trabajo
Ninguna empresa es una entidad aislada, resulta utópico imaginar que los problemas de seguridad pueden resolverse sólo y exclusivamente dentro de la propia compañía; sin embargo, puede decirse que todo comienza y acaba en la misma.
Comienza en la empresa puesto que una política de salud y seguridad en el trabajo que no esté basada en la realidad cotidiana del centro de trabajo, no es útil desde el punto de vista práctico, de ahí la necesidad de un diagnóstico inicial sobre la situación que priva en dichas áreas.
Todo acaba en la empresa, porque una política de seguridad y salud en el trabajo dentro de ella se convierte en letra muerta si no se aplica de un modo realista ni se modifica constantemente a su realidad.
Organización de la seguridad y salud en el trabajo
La base de toda organización de seguridad y salud en el trabajo es el conocimiento de los riesgos y peligros de accidentes y enfermedades, tanto cuantitativamente, en su frecuencia y grado de gravedad; como cualitativamente, teniendo en cuenta la naturaleza de las causas de los accidentes, las condiciones inseguras y riesgos físicos así como las condiciones de los ambientes en el trabajo.
Es evidente que el éxito de la organización de la seguridad en los centros de trabajo depende del esfuerzo y competencia de todos los que participan en ella.
Los accidentes de trabajo normalmente son imprevistos y, por consiguiente se consideran el resultado de la casualidad, hado, destino, suerte o desgracia, casos de fuerza mayor, u otros similares.
Sin embargo, esta actitud negativa, predominante en el pasado y parcialmente justificada en el caso de fuentes naturales de riesgo, ha ido dando lugar a una actitud más positiva, especialmente en lo que respecta a los riesgos derivados de las actividades humanas. Ahora se reconoce que la mayoría de los accidentes son previsibles y, por lo tanto, pueden evitarse con medidas de seguridad adecuadas.
Costos de los accidentes
Diversos estudios en las empresas demostraron que los accidentes pueden causar daños a la propiedad. En un mundo competitivo, debe tenerse en cuenta la carga que supone el costo de dicho perjuicio para la economía de la negociación, junto con el de los daños causados a las personas.
Qué es la seguridad
La seguridad se considera como que esté "libre de daños" la salud (lesión o enfermedad) y la propiedad. Como el daño es el resultado de un riesgo, también suele decirse que seguridad es ausencia de riesgos.
La seguridad no es un concepto en sí; depende de los conceptos de daño y riesgo. Un estado de seguridad es aquél en el que no existe peligro de accidente que produzca el daño. El riesgo a considerar cuando se utiliza el término "libre de riesgo" es el riesgo global resultante de la combinación de un riesgo potencial con una serie de circunstancias físicas y actos humanos.
La seguridad siempre debe especificarse en términos de uno o más riesgos. Hay tantos grados posibles de seguridad como riesgos. La seguridad total contra un riesgo específico sólo puede lograrse eliminando la fuente de riesgo.
Programa de seguridad e higiene
Para entender el concepto de seguridad es necesario analizar los factores que forman parte integral del trabajador y que lo relacionan con su entorno. Si no se toman en cuenta, cualquier programa de seguridad que se establezca puede estar condenado al fracaso. Es necesario tener presente que toda acción de seguridad debe ser un elemento capaz de crear cambios de "actitud", definida ésta por la Psicología como: la orientación previa o preparatoria hacia la percepción o la creación de una reacción positiva. Dicha reacción positiva pretende lograr un programa de seguridad.
En la práctica se desea que todo programa de seguridad logre resultados a través de la motivación del trabajador, se da por un hecho que cualquier documento estructurado como programa logrará, como resultado lógico, dicha motivación.
Cuando las causas que impiden que el programa de seguridad tenga un resultado adecuado, se identifican en un cambio de actitud negativo del trabajador debido a influencias del entorno.
Causas generadoras de accidentes de trabajo
En la actualidad, la industria enfrenta dos tipos de problemas que provocan accidentes de trabajo: los factores tradicionales presentes en los procesos de trabajo y los nuevos como consecuencia del progreso técnico, de nuevos productos y nuevas formas de organización del trabajo. Ambos requieren tratamientos especiales.
Marco legal de la seguridad e higiene en los centros de trabajo
En la legislación laboral de nuestro país, la Constitución, la Ley Federal del Trabajo y el Reglamento Federal de Seguridad, Higiene y Medio Ambiente de Trabajo, integran a la "seguridad y salud industrial" en un todo, donde disciplinas diversas participan en las acciones preventivas, Ingeniería, Medicina, Ergonomía, Psicología, etc.
El Reglamento Federal de Seguridad, Higiene y Medio Ambiente de Trabajo define a la "seguridad e higiene del trabajo" como:
"Los procedimientos, técnicas y elementos que se aplican en los centros de trabajo, para el reconocimiento, evaluación y control de los agentes nocivos que intervienen en los procesos y actividades de trabajo, con el objeto de establecer medidas y acciones para la prevención de accidentes y enfermedades de trabajo, a fin de conservar la vida, la salud e integridad física de los trabajadores, así como evitar cualquier posible deterioro al propio centro de trabajo".
Puntos relevantes para elaborar un programa de "seguridad e higiene"
El reglamento entró en vigor el 21 de abril de 1997, excepto en lo correspondiente al Título Segundo (Condiciones de Seguridad), Capítulo Tercero (Del equipo, maquinaria, recipientes sujetos a presión y generadores de vapor o calderas), que entró en vigor el 20 de julio de 1997. Abrogó seis reglamentos y sin menoscabo de su efectividad redujo a 168 artículos los 1,358 dispersos en ellos. Un elemento que hay que resaltar para este ensayo, es la obligatoriedad que establece el reglamento de que las empresas elaboren y apliquen un programa de seguridad e higiene, el cual considero debe abarcar los siguientes aspectos:
- la seguridad no como un tema aparte: porque es simplemente otro aspecto del proceso industrial, y debería estar integrada, junta e indisolublemente, en todos los asuntos de producción y procesos de decisión;
- la promoción y organización de la seguridad laboral y la mejora de las condiciones de trabajo por ser parte y pieza importante de toda política directiva de alto nivel;
- la responsabilidad de todo representante de la alta y media dirección, ingenieros y mandos intermedios, bajando hasta el nivel del personal de oficio, de la seguridad de la negociación, esto es, a todos los niveles de producción;
- la capacitación de los trabajadores y sus representantes acreditados, para actuar integralmente en el diseño, planificación y desarrollo de la política de seguridad y salud laboral;
- la coordinación de todas las acciones que se emprenden en el campo de la seguridad y salud laboral como parte de un programa racionalizado integral que abarque las siguientes etapas: preparación, aplicación, comprobación y controles de la implantación, comprobación de los resultados, entrada en vigor y aplicación de los mismos.
Normatividad de seguridad e higiene
En materia de normas oficiales mexicanas relativas a los procesos, a la fecha (julio de 2002) existen 28 que se agrupan en los campos de seguridad, higiene, organización del trabajo y específicas ?en 1997 existían 116?, lo que debe permitir a las empresas un mejor cumplimiento de la normatividad.
En este marco es indudable que múltiples empresas vienen realizando importantes esfuerzos en la prevención de los riesgos de trabajo, cuyos resultados se reflejan en la disminución actual de la tasa de incidencia en los últimos ocho años, de 4.5 casos por cada 100 trabajadores a 2.7, lo que beneficia a empleadores y trabajadores.
Logro sin duda, debido al interés que han puesto tanto los ejecutivos como la motivación que han logrado imbuir en sus trabajadores.
Sistema de Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo
La clave para resolver hoy satisfactoriamente los problemas de seguridad presentes y futuros, consiste en tener en la organización de las empresas un sistema de administración de seguridad y salud en el trabajo, instrumento de indudable valor en la productividad de éstas y en el bienestar de los trabajadores; de necesidad para la competitividad en la globalización actual. En este sistema se debe tomar en cuenta la política empresarial y la reglamentación existente.
Este esquema ?el establecimiento y acreditamiento de un sistema se señala por vez primera? en la reforma a la Ley del Seguro Social, específicamente en el artículo 72, emitida por el Legislativo en diciembre del 2001, como incentivo para las empresas que realizan esfuerzos en la prevención de los riesgos de trabajo.
Además, debe tenerse presente que el sistema debe ser evolutivo, es decir, modificarse y adaptarse conforme las evaluaciones, el reconocimiento y el control que se haga de cada área de la unidad productiva.
Conclusiones
Podemos considerar que la seguridad en nuestro país es relativamente joven y que apenas se considera como una disciplina que merece atención especial por personal capacitado, y como las empresas se enfrentan a una escasez de personal especializado, serán las universidades las que jueguen un papel importante en este renglón.
Es evidente que el éxito de la organización de la seguridad en el centro de trabajo depende del esfuerzo y la competencia de todos los que participan en ella. Consecuentemente, todos los grupos que colaboren en esta actividad deben ser formados adecuadamente. En particular debe hacerse especial mención a las comisiones de seguridad e higiene en los centros de trabajo.
El futuro es un gran reto, pero cada acción o intento por proteger a los recursos humanos y los activos de las empresas nos acercan a la conformación de una filosofía propia de seguridad que se convierta en la base de la productividad de nuestro país y una mejor salud para los trabajadores.
