IMSS se alista para echar mano de sus reservas financieras
Tras dos años de utilizar al mínimo estos ahorros, el instituto los usará de nuevo para mantener su viabilidad operativa
Seguridad Social
Contrario a lo que tenía previsto el año pasado, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) prevé un uso creciente de sus reservas financieras a partir del 2020, para dar viabilidad a su operación durante la próxima década, de acuerdo con el informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión sobre la situación financiera y los riesgos del periodo 2018-2019.
En el documento que por ley debe presentar el IMSS, hay claros ajustes en el monto de uso de las reservas. Si bien el informe que se presentó el año pasado (2017-2018) preveía un uso disminuido de las mismas, siendo el 2016 y el 2019 años en los que no se utilizaron reservas, el actual, el 2018-2019, tiene proyectado utilizar 5,150 millones de pesos para el 2020; al siguiente año, 7,514 millones de pesos, hasta llegar a 13,840 millones de pesos en el 2027.
En el informe del 2017-2018, se proyectaba un uso de 7,785 millones de pesos durante el 2020, para aumentar a 7,968 millones, y a partir de ahí disminuir sostenidamente cada año hasta llegar a 939 millones en el 2026.
“A partir del 2020, y como se ha reportado en informes anteriores, las proyecciones de corto y mediano plazos prevén un posible uso de la Reserva de Operación para Contingencias y Financiamiento; Reserva Financiera y Actuarial del Seguro de Enfermedades y Maternidad y el Fondo Laboral Subcuenta”, detalla el documento 2018-2019.
Por tercer año consecutivo, en el 2018 el IMSS reportó un superávit por 14,766 millones de pesos, 44% superior al del año previo. Durante el 2016, se había tenido un saldo positivo de 7,365 millones de pesos, lo que habría permitido que no se usaran reservas financieras ese año.
Durante el 2017 y el 2018, a pesar de tener superávit, el IMSS echó mano de sus reservas, aunque en su informe no especificó la razón. En el 2017 utilizó 2,219 millones de pesos, y en el 2018 se autorizó la utilización de 204 millones. Para el 2019 no se prevé uso alguno de este fondo financiero.
Por otro lado, el saldo contable de las reservas y fondo laboral alcanzaron un máximo histórico el año pasado, al sumar más de 215,535 millones de pesos, 19% más que el año pasado, derivado de los ingresos y la generación de productos financieros.
Las reservas financieras del IMSS se instituyeron por ley a partir del 2001, para garantizar la suficiencia de recursos para cada uno de sus seguros: gastos médicos, enfermedades y maternidad, invalidez y vida, riesgos de trabajo y de jubilación y cesantía.
Mayor demanda presionará finanzas
Las proyecciones que realiza el IMSS estiman que en el corto plazo tendrán importantes compromisos, ya que se requerirá una ampliación de la infraestructura hospitalaria, y prevé otorgar mayores servicios con la incorporación de nuevas obligaciones en atención al programa piloto de trabajadores del hogar, y el programa Jóvenes Construyendo el Futuro.
“Para los programas prueba piloto de la incorporación de trabajadores domésticos al Régimen Obligatorio del Seguro Social y Jóvenes Construyendo el Futuro, conforme a las proyecciones, se estima llegar a un gasto máximo de 5,657 millones de pesos en el 2019”.
Cabe destacar que, en el 2018, el gasto en servicios personales representó 45.2% del total de gasto del instituto, mostrando un incremento promedio de 0.5% en términos reales. Lo anterior, derivado principalmente de las negociaciones contractuales. De ahí que el mayor reto del IMSS es el crecimiento de la nómina del Régimen de Jubilaciones y Pensiones, ya que el aumento promedio en este rubro fue de 5.2% en términos reales, derivado del incremento salarial de la nómina en activo y de un aumento promedio en casos de 4.8 por ciento.
El IMSS tiene en proceso más de 7,000 actos de revisión a patrones, que concentran una plantilla de más de 1.2 millones de trabajadores.
“Un número importante de estas acciones busca combatir esquemas agresivos de evasión en el pago de cuotas, como son la subdeclaración de salarios, la omisión en el alta de trabajadores, los pagos por asimilados-honoristas, o el comportamiento irregular de ciertos sectores económicos, entre ellos el outsourcing”, refirió en su informe.
Con información de El Economista.