El denominado Seguro de Salud para la Familia es un servicio que proporciona el IMSS a las personas que no cuentan con algún esquema de seguridad social.
Este se contrata de manera voluntaria por quien será el titular de la cobertura, la cual también ampara al cónyuge o concubino, a los hijos, a los padres del solicitante del seguro, e incluso a los abuelos, nietos y hermanos.