Para adquirir el financiamiento, es necesario que ambos acreditados cuenten con la precalificación mínima, la cual es de 1080 puntos
Comprar una casa puede ser más fácil si se cuenta con un financiamiento del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), ahora bien, si el monto otorgado no alcanza para adquirir la propiedad deseada, se puede aprovechar la opción de Unamos Créditos.
Este producto permite a los acreditados adquirir una vivienda de mayor valor bajo la figura de copropiedad, ya que al juntar el crédito con otra persona se puede obtener un monto de hasta 4 millones 671 mil pesos, lo que aumenta las posibilidades de adquirir una mejor vivienda.
Unamos Créditos de Infonavit puede ser utilizado ya sea con una hermana o hermano, padres, amigos e incluso la pareja aunque no estén casados, ya que este no es un requisito, y entre las ventajas tienen que pueden comprar una casa nueva o existente.
El financiamiento mantiene una tasa de interés fija diferenciada según el nivel salarial y va del 3.09% al 10.45%, además, se pueden realizar pagos anticipados o la opción de liquidar el crédito sin penalizaciones.
El Instituto señaló que este producto permite realizar aportaciones patronales subsecuentes, las cuales se abonarán al capital del crédito, lo cual beneficia a los trabajadores ya que así se termina de pagar más rápido y ambos acreditados cuentan con seguro de vida y Fondo de Protección de Pagos durante el plazo que dure tu deuda, mientras la vivienda adquirida cuenta con seguro de daños.
Para unir el crédito Infonavit es indispensable tener una relación laboral vigente, cumplir con los puntos de precalificación, verificar si se es elegible en Mi Cuenta Infonavit, es decir, si se cuenta con la puntuación mínima de precalificación que es de 1080 puntos y en caso de que así sea, realizar el curso en línea “Saber Más Para Decidir Mejor”.
Obligaciones al unir crédito Infonavit
Al ser un financiamiento en conjunto, se debe considerar que las dos personas que adquieran el crédito deben cubrir los gastos de conservación de la vivienda y ambos son responsables de dividir y pagar el impuesto predial, agua y demás servicios que requieran para el buen funcionamiento de la vivienda.
Además, si alguno decide hacer alguna mejora a la casa, deberá contar con el consentimiento del otro copropietario, porque ambos son dueños en su parte proporcional de la vivienda.
