Por Samantha Álvarez
Las fallas en el conteo de las semanas cotizadas, errores en los documentos personales y la postergación del trámite de solicitud de pensión son los principales obstáculos que alejan las oportunidades de los trabajadores para tener una jubilación más digna, informó el consultor experto en retiro Luis Manuel Trejo.
El especialista afirmó que para recibir la pensión del Seguro Social, el empleado debió comenzar a trabajar antes del 1 de julio de 1997, tener 500 semanas de cotización, 60 años cumplidos, estar dado de baja ante el IMSS al momento de realizar la solicitud y no tener un trabajo remunerado.
“Si el trabajador tiene entre 60 y 64 años alcanza del 75% al 95% del máximo de su pensión calculada y si tiene 65 años se llevará el 100% de su pensión”, explicó el director general de Retirum, David de la Sota.
El monto de la pensión dependerá del promedio del salario que recibió durante sus últimos cinco años de trabajo, agregó el experto de Retirum.
Las inconsistencias y errores en el trámite de la pensión pueden retrasar entre tres meses y dos años su entrega. Por ello toma en cuenta los siguientes obstáculos.
El trámite de pensión debe iniciarse en las oficinas de la Afore que administra tu cuenta. Ahí deberás pedir una pre solicitud de retiro. El siguiente paso es visitar tu Unidad Médico Familiar (clínica) para hacer la solicitud de pensión.
El Seguro Social te hará un documento de oferta o elección en donde explicará cuánto dinero recibirás por cualquiera de los dos esquemas (Ley del 73 o Ley del 97). Si empezaste a cotizar antes de julio de 1997, es el momento de elegir bajo qué régimen pensionarte.
Para realizar el trámite de pensión, necesitarás contar con CURP, RFC y tramitar una cuenta bancaria. “Si una persona trabaja en una ranchería o en una comunidad sin acceso a internet es difícil que tramite sus documentos o que verifique si sus datos son correctos”, comentó David de la Sota.
Cuando el Seguro Social comenzó a digitalizar los datos personales de los trabajadores, algunas actas de nacimiento estaban escritas a mano, “sobre todo las más antiguas” y al momento de copiar nombres, apellidos y fechas de nacimiento estos pudieron copiarse incorrectamente.
“Una corrección en el registro civil, SAT o en su CURP puede llevarle al trabajador entre tres y seis meses”, aseguró David de la Sota.
Hasta el año 1982 el Seguro Social comenzó a llevar un registro de las semanas cotizadas de los trabajadores, muchos de estos archivos aún están en físico. Al haber pasado tiempo los trabajadores pudieron haber perdido sus “hojas rosas” que indicaban el inicio de su actividad laboral, la empresa para la cual trabajaban y su número de seguridad social.
“En este caso el Seguro Social deberá hacer un conteo manual de semanas extraviadas, a su vez el usuario deberá recabar el mayor número de recibos de pago para comprobar sus trabajos anteriores”, agregó el experto de Retirum.
Si al cumplir 60 años el trabajador pospone u olvida solicitar su jubilación, aún tiene tiempo para hacerlo mientras mantenga su conservación de derechos, que equivale a una cuarta parte de lo que el trabajador haya cotizado.
Si el retraso por reclamar la pensión es menor a un año, el Seguro Social pagará esa tardanza en una sola exhibición; pero si el trabajador dejó pasar su periodo de conservación de derechos tendrá que volver a emplearse y cotizar entre 6 y 12 meses más para poder pensionarse.
Obtener la pensión por viudez también se complica cuando no hay un acta de matrimonio o documento que acredite que la pareja estuvo casada o en concubinato.
Para recuperar ese derecho, es necesario que la viuda acuda a un juzgado de lo familiar y solicite un documento que avale el concubinato. El trámite puede tardar hasta seis meses.
Con información de CNN Expansión
