En México existen diversas empresas de mensajería y paquetería que ofrecen el servicio de transporte internacional de mercaderías, y a través de ellas se pueden traer a territorio nacional o llevar al extranjero productos. Se encargan del despacho aduanero, a través de agente o apoderado aduanal.
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El envío de bienes por este medio es muy común y frecuente, y puede ser una opción para cuando se requiera introducir –de forma rápida y segura– al país mercancías, cuyo valor en aduana no exceda de 5,000 dólares, y no se cuente con padrón de importadores.
En ese caso, en el pedimento de importación definitiva se deben asentar los datos relativos al RFC, nombre, denominación o razón social del importador.
Al amparo de esta facilidad no puede llevarse a cabo más de una operación por destinatario o consignatario en cada mes calendario.
Por la importación de esos bienes se paga 16 % del IGI; excepto, tratándose de bebidas alcohólicas, cigarros y puros, en estos que se alcanzan aranceles de hasta 114.40 %, 573.48 %, y 373.56 %, respectivamente, tasas que se reducen cuando esos productos ostentan marcas, etiquetas o leyendas que los identifican como originarias de países con los que México tiene suscritos tratados de libre comercio (reglas 3.7.3. y 3.7.4., Reglas Generales de Comercio Exterior 2018).
Es importante conocer las diferentes compañías que prestan servicios de envíos internacionales y seleccionar la que se ajuste a las necesidades de la empresa.
