A una empresa filial le suspendieron el padrón de importadores, por supuesto ™domicilio no localizado∫, y está en espera de que la autoridad fiscal haga la visita de verificación en el RFC, y así gestionar la reincorporación al padrón. Ante ello y como el trámite tardará bastante tiempo, ha decidido enajenarnos la mercancía que mantiene en recinto fiscalizado, a lo cual accedimos pues es de la que también compramos a proveedores extranjeros. Al efecto nos expidió el CFDI con IVA, mismo que fue rechazado por el contador de la empresa por no tener los datos del pedimento con el que ingresó la mercancía al país; al respecto el proveedor comenta que ese comprobante no puede tener esa información porque no se trata de una venta de primera mano, y que nosotros tendremos que importarla; de ser cierto, entonces
Por qué está facturando con IVA
Cabe aclarar que los recintos fiscalizados son almacenes de particulares –persona moral constituida de conformidad con las leyes mexicanas– concesionados por la SHCP para prestar los servicios de manejo, almacenaje y custodia de las mercancías, y no solo se encuentran ubicados dentro de los recintos fiscales sino también colindan con ellos (art. 14, Ley Aduanera).
Luego, al encontrarse los recintos fiscalizados en territorio nacional, se estará ante la aplicación de las disposiciones de la LIVA, es decir, trasladar el impuesto por las enajenaciones que se lleven a cabo dentro de los mismos; razón por la cual se está facturando la operación con el gravamen (arts. 1o. y 10, LIVA y 31, RLIVA).
Por otra parte, al transmitirse los derechos y las obligaciones al adquirente, este se encargará de gestionar el despacho de importación de las mercancías almacenadas en dicho recinto, acto por el cual también se pagará el IVA.
Lo anterior deberá estar soportado con los contratos inherentes a la enajenación de las mercancías en dichos recintos.
