Para el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), México requiere un ambiente de certidumbre y un Estado de derecho sólido que permitan atraer más inversiones y, en consecuencia, fortalecer la actividad económica.
Las medidas de la actual administración federal deben sustentar un entorno de “reglas claras del juego”, para dar un incentivo a los dueños del capital y canalicen sus recursos a proyectos rentables que detonen la infraestructura, señaló.
“No hay duda de que la inversión es el principal motor del crecimiento y esta proviene principalmente del sector privado”, pues de este rubro corresponde 86% del total de la inversión del país, enfatizó en su análisis económico semanal.
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El organismo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) apuntó que las autoridades deben asumir el compromiso de generar un entorno de seguridad y facilidad para atraer el capital privados a los proyectos públicos, pues “es claro que el gobierno federal no cuenta con los recursos suficientes”.
Enfatizó que lo anterior seguirá así mientras su prioridad sea el gasto social y, por ello, urgió a contrarrestar los pronósticos negativos de la economía si el objetivo es lograr tasas de crecimiento superiores al 2%.
En un escenario en el que los flujos de inversión, tanto nacional como extranjera se mantienen cautelosos, aumenta la probabilidad de cumplimiento de los pronósticos de un menor crecimiento de la economía para el presente año y, por tanto, también implica una menor capacidad de generar los empleos que requiere la población, sostuvo.