Actualmente, la delincuencia es un problema recurrente que no solo afecta en las calles, sino también en sitios considerados seguros, como las sucursales bancarias. Los robos en estos lugares no solo implican la sustracción de dinero de la entidad, sino también el despojo de pertenencias de los clientes. Esto plantea la pregunta: ¿debería el banco asumir la responsabilidad por las pérdidas materiales de sus clientes?
Recientemente, un cliente afectado por un robo a mano armada en una sucursal bancaria, donde le fue arrebatado el dinero destinado a un depósito en ventanilla, decidió demandar a la institución, exigiendo la reparación del daño. Este caso dio origen a la siguiente tesis aislada, que aborda la cuestión de si el banco tiene o no responsabilidad civil en tales circunstancias:
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Si bien los bancos también sufren pérdidas ante un robo, en ocasiones no cumplen con todas las medidas para prevenir estos delitos. Esta tesis brinda a los clientes afectados una vía para demandar la reparación de pérdidas materiales, aliviando su carga de probar la negligencia del banco.
Finalmente, saber que podrían ser responsables de las pérdidas de los clientes debería ser un incentivo adicional para que los bancos cumplan rigurosamente con las normativas de seguridad establecidas por la ley.
