La pandemia del coronavirus ha tenido un fuerte impacto en la economía no solo mexicana, sino en la de todo el mundo, consecuencia de ello, diversas empresas se vieron forzadas a reducir el salario de sus trabajadores, despedir a algunos de ellos e incluso cerrar definitivamente.
Lo anterior ocasionó que la economía de muchas familias se vieran afectadas y mientras los pronósticos no son alentadores pareciera que no hay manera de revertir el daño.
Sin embargo, el director de finanzas de Homie.mx, Arturo Rosales, destacó que si hacemos algunos cambios a nuestra rutina de gastos y planteamos una buena estrategia podríamos ver mejoras, eventualmente.
“La forma en la que se escribe crisis en chino se compone de dos palabras en chino que significan riesgo y oportunidad. Entonces, en un evento tan fuerte como el que estamos viviendo, puede significar un deterioro total de la economía familiar, puede significar resiliencia de la economía familiar, puede significar oportunidad para la economía familiar”, afirmó el ejecutivo.
La creatividad es la clave
Sí, nuestras finanzas pueden mejorar aún en medio de una crisis mundial, pero para que eso pase hay que ser creativos y principalmente, buscar la manera de aumentar los ingresos, subrayó Rosales.
Aún cuando hay disminuciones en el consumo y despidos masivos; otras industrias cuentan con oportunidades laborales y aunque no sean de nuestro campo o especialidad un empleo alterno podría darle un empujón a la situación.
Por otra parte, podríamos echar mano de algunos talentos o pasatiempos que no habíamos desarrollado y comercializarlos, el punto es aumentar la cantidad de dinero que llega a nuestro hogar.
El ejecutivo de Homie.mx, recordó que la inversión es de suma importancia e incluso, indicó que entre el 15 y 30% de los ingresos se deben destinar a este propósito.
Señaló que hay diversas maneras para hacerlo, algunas de ellas muy seguras como los Cetes de gobierno.
Ser organizados y evitar vicios
De nada servirá obtener más dinero si no empezamos a disciplinar cómo lo utilizamos.
Con el confinamiento y el no gastar en traslados o salidas a restaurantes o bares, nos llegó una “falsa percepción de ahorro”, pero lo cierto es que solo los intercambiamos por otros egresos como servicios de delivery, membresías de servicios de streaming, compras en línea y algunas remodelaciones.
Sin embargo, aclaró el experto, este camino por mejorar nuestras finanzas no termina y debemos tener la fuerza de voluntad suficiente para que no hagamos de estos ejercicios algo temporal, sino que se convierta en parte de nuestra cotidianidad.
De no poder resistirnos a la tentación, aconsejó hacernos de algunos aliados que lo hagan por nosotros y nos alejen de volver a los malos hábitos, como aplicaciones que hacen los apartados por nosotros o emiten alertas.
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También recomendó acercarse a un experto en finanzas que diseñe un plan personalizado y esté pendiente de nosotros.
Rosales advirtió que el principio de este camino puede ser complicado, pero a la larga el tener un ahorro suficiente para enfrentar las malas épocas será mejor que los pequeños gustos.
