Corrupción interna golpea la rentabilidad empresarial

Corrupción interna golpea la rentabilidad empresarial

Un informe revela que la corrupción interna cuesta a las empresas hasta un millón de dólares por incidente. La integridad es un aspecto primordial en la contratación e implementación de controles internos robustos
La corrupción en México es un problema persistente que no sólo afecta a instituciones gubernamentales, sino que también se extiende al sector privado. Dentro de las empresas, los fraudes ocupacionales pueden generar pérdidas de hasta un millón de dólares por incidente lo que puede provocar un impacto grave en su rentabilidad y reputación.
El “Occupational Fraud 2024: A Report to the Nations” de la Asociación de Certificadores de Fraude (ACFE por sus siglas en inglés), indica que más de la mitad de los fraudes empresariales ocurren debido a la falta de controles internos (32%) o a la anulación de los ya existentes (19 %).
Llama la atención que los comportamientos indebidos, que dañan la reputación y la rentabilidad en las empresas, pueden “parecer mínimos” pero con un impacto significativo.
Un 64 % de las empresas en la región señala que las principales amenazas internas son la falta de comprensión de las reglas de conducta (28 %), la alta rotación de empleados (26 %), la escasez de recursos (25 %), la presión de la dirección (24 %) y el fracaso de los controles financieros (20 %).
La integridad de un candidato es un criterio esencial desde el proceso de selección, y cual sea el nivel que se ocupe en la organización, desde un puesto operativo hasta altos líderes. La razón es que los valores éticos de los empleados pueden influir directamente en la seguridad financiera, el desarrollo de comportamientos poco éticos y el ambiente laboral de una organización.
apropiación indebida de activos: representa el 89 % de los casos y genera pérdidas promedio de 120 mil dólares
corrupción: ocurre en el 48 % de los casos y genera pérdidas de hasta 200 mil dólares
fraude en los estados financieros: es el menos común (5%), pero el más costoso, con pérdidas de hasta 766 mil dólares
Estos datos de la ACFE demuestran que, aunque el fraude en los estados financieros es menos frecuente, su impacto es hasta seis veces mayor que la apropiación indebida de activos. Esto se debe a que los fraudes financieros suelen ser cometidos por altos ejecutivos o propietarios de las empresas, quienes tienen acceso directo a los recursos y la información clave de la organización.
De acuerdo con el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) de Transparencia Internacional, México ocupa el lugar 120 de 140 países evaluados, con un puntaje de 26 sobre 100, donde 100 representa la menor percepción de corrupción.
MIDOT considera que, para reducir este problema dentro de las empresas, es fundamental implementar estrategias efectivas de prevención y control.
Uno de los primeros pasos es la evaluación de la integridad en los procesos de contratación, asegurándose de que los candidatos compartan los valores de la organización y cuenten con un historial ético sólido. Además, es recomendable la creación de un comité de integridad encargado de analizar riesgos, establecer medidas preventivas y detectar posibles irregularidades.
Capacitar al equipo de recursos humanos en la identificación de señales de alerta y en la aplicación de protocolos de investigación también es clave. Finalmente, fomentar una comunicación efectiva y mejorar continuamente los procesos internos permitirá fortalecer la cultura de cumplimiento y minimizar los riesgos de fraude.
Las empresas deben comprender que la prevención del fraude no es solo una cuestión de cumplimiento, sino una estrategia para garantizar la sostenibilidad del negocio. Invertir en integridad es invertir en el futuro de la organización.