Las personas transferidas de su país de origen para prestar servicios a empresas mexicanas deben, principalmente, determinar su residencia fiscal, además de cumplir diversos requisitos en materia legal y migratoria, advirtió la firma Salles Sainz Grant Thornton (SSGT).
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Por lo anterior, el socio especialista en impuestos de la oficina de SSGT en Querétaro, Carlos Hernández, detalló una serie de aspectos que se deben de tomar en cuenta las empresas nacionales, entre los que se destacan:
- establecer el régimen fiscal aplicable en México, basándose en la ley fiscal y tratados internacionales en materia tributaria firmados por los gobiernos mexicano y extranjeros
- verificar la estructura utilizada para el pago de la nómina del expatriado a efecto de definir cargas impositivas tanto en el país de residencia como en el anfitrión
- cerciorarse de que la empresa mexicana donde se llevará a cabo la prestación de los servicios por parte del expatriado esté registrada ante las autoridades migratorias mexicanas.
- la visa de trabajo que obtenga el expatriado que será asignado en México y/o, en su caso, realizar la renovación o cambio de la misma.
SSGT considero que las compañías mexicanas deben determinar, antes de cualquier contratación, los mecanismos a seguir para el pago de algunos beneficios en especie, como la renta de casa, o la educación de los hijos y la ayuda de automóvil, entre otras, a fin de evitar contingencias en materia de deducibilidad de esos beneficios.
La firma de contadores públicos expuso en un comunicado que los puntos antes mencionados se deben realizar en cumplimiento de las formalidades y requisitos establecidos por las leyes fiscales, laborales y migratorias, asumiendo que el expatriado retornará en algún momento a su país de residencia.
