El SAT en coordinación con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) inició en Ocotán, Zapopan, Jalisco, la destrucción de más de 10 millones de cigarros y 49 toneladas de tabaco en rama introducidos ilegalmente al país.
MÉXICO, ¿DE LOS PAÍSES MÁS AVANZADOS VS LA EVASIÓN FISCAL?
En un comunicado, la dependencia explicó que con el cigarro de rama se podrían producir más de 59 millones de unidades, los cuales en el mercado informal se comercializan con un valor de 50 centavos mexicanos, lo cual resultaría en un ingreso aproximado de 29 millones de pesos (mdp) y una omisión tributaria por más de 120 mdp.
El jefe del SAT, Osvaldo Santín Quiroz, apuntó que el organismo tiene como mandato asegurar el cumplimento de la ley en materia fiscal y aduanera, por lo que esta acción demuestra que a través de la cooperación interinstitucional (entre órganos gubernamentales y cámaras empresariales), “se pueden dar mejores resultados a la sociedad”.