Regulación fiscal de las plataformas electrónicas
Se busca que las empresas contribuyan con el país donde generan utilidades
Fiscal Contable
Respecto a la posibilidad de establecer un impuesto relacionado con el comercio electrónico, el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, destacó que "el asunto es parte de un intenso debate internacional, tanto en el Grupo de los 20, como en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)".
El pasado el 11 de julio, el parlamento francés aprobó la implantación de un impuesto de 3% a las empresas digitales con operaciones de más de 750,000 millones de euros en todo el mundo y más de 25,000 millones en Francia. Esta medida ha sido cuestionada por enfocarse únicamente en gravar a las grandes empresas del comercio electrónico, lo que se ha observado como impuestos dirigidos a las compañías estadounidenses.
En México el comercio electrónico ha crecido más de 400% en los últimos 6 años, lo que lo posiciona como uno de los principales mercados en Latinoamérica, pasando del lugar 35 al 19 dentro del ranking mundial.
En el caso mexicano, la propuesta va encaminada a que los residentes en el extranjero que prestan sus servicios en territorio nacional paguen impuestos por todos los ingresos que reciben de los consumidores mexicanos; por lo que no se estaría estableciendo ningún impuesto nuevo ni se aumentando la tasa de ningún tributo.
El legislador señaló que el Programa de Trabajo para Desarrollar una Solución Consensuada a los Retos Tributarios Originados por la Digitalización de la Economía de la OCDE, establece algunas propuestas, entre las que destaca otorgar mayor potestad tributaria a los países donde se localiza el mercado o los usuarios finales.
El pasado el 11 de julio, el parlamento francés aprobó la implantación de un impuesto de 3% a las empresas digitales con operaciones de más de 750,000 millones de euros en todo el mundo y más de 25,000 millones en Francia. Esta medida ha sido cuestionada por enfocarse únicamente en gravar a las grandes empresas del comercio electrónico, lo que se ha observado como impuestos dirigidos a las compañías estadounidenses.
En México el comercio electrónico ha crecido más de 400% en los últimos 6 años, lo que lo posiciona como uno de los principales mercados en Latinoamérica, pasando del lugar 35 al 19 dentro del ranking mundial.
En el caso mexicano, la propuesta va encaminada a que los residentes en el extranjero que prestan sus servicios en territorio nacional paguen impuestos por todos los ingresos que reciben de los consumidores mexicanos; por lo que no se estaría estableciendo ningún impuesto nuevo ni se aumentando la tasa de ningún tributo.