Pese a la creencia de que atender varias tareas al mismo tiempo es sinónimo de eficiencia, el trabajo bajo presión abruma y agota la energía de los trabajadores, volviéndose un obstáculo de la productividad, reveló Sofamatch.
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La coach de productividad de la firma, Natalie Houston, explicó que creer que manejar muchas cosas a la vez es producción, pero nuestro cerebro no está diseñado para hacer muchas tareas cognitivas al mismo tiempo; además, diversos estudios demostraron que se disminuye considerablemente la productividad después de las 50 horas trabajadas a la semana, pues las personas que trabajan más de 70 horas no producen más que las que trabajan 55 horas.
Por otro lado, refirió que la revista Science en el 2011 publicó un estudio que demostró que actualmente algunas personas simplemente prefieren investigar información en lugar de memorizarla.
Respecto a la cultura profesional vigente, diversos estudios demostraron cómo el trabajo desde el hogar, espacios de coworking o lugares públicos como cafeterías aumentan la productividad denotando que las preferencias y los hábitos generacionales impactan directamente en el desempeño.
Finalmente, la especialista recomendó:
- comenzar con las tareas pequeñas o cortas,
- organizar los pendientes conforme a una línea de tiempo,
- revisar o calendarizar las actividades de las siguientes semanas,
- mantener el espacio limpio de trabajo para aumentar la productividad del usuario, y
- el Internet, al ser una parte significativa en nuestras vidas y su rol en el trabajo, debe utilizarse como apoyo del desarrollo de las labores y una distracción dosificada durante las jornadas laborales
