¿México promueve el empleo de repatriados y refugiados?
Especialistas coincidieron en la necesidad de una reforma para que quienes lleguen al país tengan la seguridad de contar con un empleo que cubra sus necesidades
Laboral
La industria del turismo podría representar la mejor opción para dar empleo a los migrantes que regresan a México y a los extranjeros refugiados, afirmó la experta en políticas públicas y migración, Eunice Rendón.
Lo anterior derivado de que la Jefa de coordinación sectorial de turismo, Elena Achar Smar pronunciara que la nueva plataforma de la Secretaría de Turismo y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social “Conéctate con el turismo” sería una herramienta para emplear a los repatriados.
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La especialista indicó que los mexicanos que regresan al país luego de haber migrado y trabajaron en el extranjero vuelven con habilidades como el manejo de otro idioma que empatan con los perfiles que necesitan las empresas del sector.
“Esto con inglés porque es lo más obvio, pero así hay más habilidades que ellos adquieren en su estancia en Estados Unidos y es muy importante poderlos revalidar aquí” refirió al destacar la importancia de la certificación de conocimientos que esta y otras plataformas ofrecen para los trabajadores.
No obstante, la LFT no considera ningún tipo de incentivo o facilidad para que las empresas prefieran a los empleados que vienen del extranjero por encima de quienes viven en el país.
“Nuestra ley federal del trabajo es de 1970, aunque ha sufrido algunas modificaciones, la verdad es que no está actualizada a la realidad que vivimos el día de hoy, precisamente en este tipo de cuestiones y no contempla ningún tipo de facilidad o medidas especiales que puedan apoyar a connacionales a regresar a México después de una deportación”, detalló Tania Terrazas, abogada especialista en temas laborales del despacho Littler.
Sin embargo, aclaró que diversas organizaciones sí ofertan opciones para que quienes reingresen a México obtengan un documento que valide que cuentan con habilidades para desempeñar ciertos talentos, a la vez que la Secretaría de Educación Pública (SEP) contempla facilidades para homologar los estudios realizados en otros países.
La suerte es la misma para los refugiados, de acuerdo con la LFT, las empresas pueden contratar un máximo de 10% de empleados extranjeros y para el caso de técnicos y profesionales, únicamente pueden ser reclutados de no haber un mexicano con el perfil para desempeñar la labor.
Aunado a lo anterior, pese a que estos inmigrantes tienen una “residencia permanente”, las empresas desconocen los requisitos y los documentos que deben tramitar para reclutarlos.
“Respecto a la contratación, pues realmente cuando le dan una residencia permanente tienen ellos implícito el permiso para trabajar, pero muchas empresas no saben que viene implícito este derecho”, aclaró Carola Vida, abogada experta en migración del Despacho Littler.
A ello habría que agregarle que el Estado no tiene ningún tipo de programa que controle que la residencia de los refugiados esté condicionada a que aporten a la vida productiva del país, ni siquiera que tengan un medio de subsistencia mientras vivan aquí.
“Ese el gran problema que existe, por lo que hay que reformar la ley, porque no se contempla este concepto”, evidenció Vidal y agregó que en un inicio los refugiados no tienen la posibilidad de trabajar debido a que en el comienzo del trámite de la residencia no tienen derecho a CURP ni a RFC, por lo que no pueden ser contratados, ni auto emplearse.
“Aquí hay un choque de criterios porque migración sí les da un documento con el que pueden tener una actividad remunerada, sin embargo, la secretaría de hacienda, bueno el SAT, ya no les da un RFC porque no tienen un CURP, entonces a lo que orillan es que el extranjero o el refugiado se vaya a realizar actividades sin tener que pagar impuestos” reiteró la experta en migración.
Pese a que el gobierno mexicano está en el proceso de creación de plataformas de vinculación de empresas con trabajadores que vienen del extranjero, no existen leyes que garanticen que aquellas personas que vendrán a nuestro país, ya sea por deportación o porque México les acoja, tendrán un medio del cual vivir.
“Probablemente se empiecen a desarrollar un poco más, pero nuestra ley (LFT) que es prácticamente la única que regula toda la cuestión laboral en el país, no las contempla”, puntualizó Tania Terrazas.
Por lo anterior, las tres especialistas coincidieron en que es necesaria una reforma a las leyes que asegure que quienes lleguen al país aporten a la vida productiva y tengan un empleo que les permita cubrir sus necesidades.