Las empresas tienen que asumir situaciones que las pueden colocar en riesgos financieros o de productividad; por ejemplo, fenómenos naturales; siniestros provocados por el hombre; conflictos políticos; eventos causados por la inseguridad, entre otros.
LEE: EFECTO DE UN ENTORNO EMPRESARIAL FAVORABLE
A esto se le conoce como una crisis, la cual de acuerdo con una acepción establecida por la Real Academia de la Lengua Española es un cambio profundo y de consecuencias importantes en un proceso o una situación, o en la manera en que estos son apreciados.
Dichas circunstancias son temporales, pero alteran los procesos ordinarios y justifican la implementación de políticas extraordinarias, en donde los líderes de grupo son a quienes el personal busca para responder inquietudes y encontrar un eje de actuación.
Por ello, en los directivos debe destacar su capacidad de reacción ante las contingencias, así como de disminuir, o evitar los impactos negativos en la organización.
Por tal razón, toda compañía debe establecer una política que conlleve a:
- crear en sus integrantes la percepción de que existe control y eso les brinde cierta seguridad
- producir un sentido de aprendizaje respecto del evento que se sortea, a efectos de superarlo, e
- implementar tácticas, por las cuales se busque minimizar los efectos negativos y los necesarios para darle seguimiento a aquellas
