La tasa de desempleo juvenil es tres veces más alta que la de los adultos, y el 21% de la población joven no estudia ni trabaja
Como consecuencia de la crisis sanitaria por COVID-19, más del 12% de los jóvenes en México, perdieron su empleo en el sector formal, así lo informó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
De acuerdo con el organismo financiero, la inserción de los jóvenes a la vida laboral, es una problemática que prevalece en América Latina y el Caribe. La tasa de desempleo juvenil es tres veces más alta que la de los adultos, la de informalidad es 1.5 veces más. Además, el 21% de la población joven no estudia ni trabaja.
Al respecto, la consultora de la división de mercados laborales del BID, María Fernanda Gómez, señaló que en América Latina y el Caribe, se han perdido más de 17 millones de empleos, y los jóvenes han sido los más afectados.
Asimismo, mencionó que al comienzo de la pandemia, a nivel mundial, dos de cada cinco jóvenes vieron reducidos sus ingresos y más del 20% se vieron impactados en el acceso a una vivienda. Señaló que mientras en México el 12% de los jóvenes perdieron su empleo, en Lima, capital de Perú, la tasa de desempleo juvenil se elevó al 70 por ciento.
Gómez mencionó que la falta de acceso de los jóvenes al mercado laboral, conlleva serias consecuencias, ya que además de reducir los ingresos para los servicio básicos, puede afectar la trayectoria laboral en términos de acceso, calidad e ingresos, por más de una década.
Finalmente, dijo que algunas de las barreras que limitan el acceso de los jóvenes al trabajo son la diferencia que existe entre las aspiraciones y la realidad del mercado laboral, además de factores regulatorios.
*Con información de Mundo Ejecutivo