Cómo lograr un “retorno saludable al trabajo”
La finalidad de todo patrón debe ser establecer medidas preventivas para un regreso saludable al centro laboral
Seguridad Social
Para tener un retorno saludable al centro de trabajo es necesario que el patrón cuente con un sistema que le permita evaluar el riesgo de contraer COVID-19 dentro de las instalaciones y en la medida de lo posible romper de manera oportuna las cadenas de transmisión, garantizando la continuidad de sus actividades laborales, aun cuando se presenten nuevos casos del virus.
De ahí que el IMSS emitiera las siguientes Recomendaciones para un retorno saludable al trabajo como parte de la política de apoyo al empleo por COVID-19, estas se dividen en dos fases.
Fase 1 Elaboración del plan de trabajo por los centros laborales
- Establecer un Comité de seguridad y salud frente al COVID-19. El objeto es tener una visión global de los problemas que enfrenta la empresa y subsanarlos para una mejor prevención ante el virus. Este debe estar compuesto por una parte patronal, sindical y de trabajadores
- elaborar un diagnóstico situacional que permita conocer la situación actual del centro de trabajo para desarrollar un plan de acción. Es importante que el comité lleve a cabo las siguientes acciones, identificar:
- servicios esenciales de la empresa
- puestos de trabajo y actividades, y
- personal disponible, y
- estructurar un plan para el retorno seguro al trabajo. Se sugiere que la reincorporación se realice de acuerdo con el grado de riesgo de los subordinados o de las compañías para aplicar las medidas de distanciamiento adecuado
En la estructura del plan para el regreso seguro a las labores se deben considerar los siguientes aspectos:
- ingeniería. Son los cambios que debe sufrir el lugar de trabajo para disminuir los riesgos por COVID-19 por ejemplo: uso de barreras físicas; sistemas de extracción y ventilación; señalización de áreas de trabajo; sensores de distancia y separación de entrada y salida
- administración. Refiere a las modificaciones sobre la forma en cómo deben laborar los colaboradores, estas deben estar orientadas a acciones para garantizar el distanciamiento social de al menos 1.5 metros entre los trabajadores
- protección personal. Es todo el equipo utilizado por el personal para minimizar el riesgo de infección en los empleados en el desempeño de sus actividades. Es indispensable que de tener contacto con el público se considere usar cubrebocase, protectores faciales o goggles
- sanitización y desinfección. Se trata del proceso que consiste en limpiar y eliminar algunos microorganismo que ocasionan enfermedades. Debe estar consciente de:
- la importancia del uso de tapetes sanitizantes u otras alternativas similares en los accesos al centro laboral
- dar seguimiento a los protocolos de limpieza y desinfección diaria; es decir, revisar ¿qué se va a limpiar? ¿con qué frecuencia? ¿quién lo efectuará? Y ¿quién revisara?
- contar con dispensadores de alcohol gel a 70 % en los pasos principales a la empresa, procesos productivos, comedores, cafeterías, etcétera, y
- tener toallas desechables para secarse las manos y evitar el mal uso de estas, y
- capacitación. Es uno de los aspectos más importantes, pues a través de esta se puede adquirir conocimiento, actitud o habilidades, en materia de contención del coronavirus
Fase 2 Retorno gradual y escalonado
El ingreso del personal debe ser de acuerdo con lo determinado y planeado durante la etapa 1.
Al ingresar al centro de labores el personal no debe evitar los filtros de entrada y tiene que atender las recomendaciones para evitar el contagio en las áreas comunes de trabajo. Por ello, los subordinados diariamente deben:
- seguir las encomiendas individuales de etiqueta respiratoria, higiene de manos, uso de equipo de protección personal (EPP) y vestimenta
- evitar obstaculizar las actividades de limpieza y desinfección por el personal responsable en la empresa, de las instalaciones, mobiliario y herramientas de trabajo, y
- favorecer que se cumplan con las disposiciones para la sana distancia en juntas y reuniones, horarios escalonados, actividades de home office, así como el uso y control de EPP
Por otra parte, se debe colaborar y participar en el cumplimiento de los protocolos establecidos en la compañía según lo determinado por la Secretaría de Salud.
En caso de que exista servicio médico, los trabajadores deben acudir periódicamente, sobre todo si se tienen padecimientos crónico degenerativos, está en el periodo de embarazo o lactancia y si no se tienen hábitos saludables en ejercicio, alimentación, recreación y sueño.
De no contar con servicio médico en el centro laboral, el patrón debe solicitar al trabajador acudir a recibir atención médica en la Unidad de Medicina Familiar del IMSS que le corresponda.
Finalmente, se debe participar informando en la identificación de áreas de oportunidad y dar continuidad y vigilancia a las incapacidades temporales para el trabajo que tengan los subordinados.