A pesar de que en México el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) establece un mecanismo para que los trabajadores formales aporten "obligatoriamente" a su fondo de retiro, este no garantiza una pensión acorde con sus ingresos durante la juventud, por ello es indispensable que realicen aportaciones voluntarias adicionales.
No obstante, de acuerdo con el director del Global Pensions Programme y Presidente de Novaster, Diego Valero, tomar esta decisión es un tanto complicada para los mexicanos, por una serie de sesgos en la toma de decisiones, entre los que se destaca:
innercia, tratamos de evitar actuar
aversión a la pérdida, esa sensación de que antes de ahorrar teníamos más
autocontrol, no tomar decisiones por lo que esto cuesta y mejor dejarlo para después
¿Cómo la economía del comportamiento nos puede hacer ahorrar?
Durante su ponencia con motivo del Encuentro Amafore - FIAP 2023, Valero indicó que a través de la economía del comportamiento se pueden combatir los sesgos conductuales, uno de los ejemplos más claros de ello es el Nudging.
Este concepto se refiere a una manera de empujar a la población a tomar decisiones que las beneficien a largo plazo.
Destacó que es la forma más "coste -efectivo" de desarrollar sistemas de pensiones, más que cualquier otro incentivo.
"Por cada dólar invertido en nudging, se pueden obtener hasta 100 dólares de aumentos en las aportaciones", apuntó.
En ese sentido sugirió presentar las opciones de ahorro en formatos más o menos granulares (diarios, semanales o mensuales) en vez de en un monto mayor, aunque al final del período se trate de una misma cantidad.
Señaló como exitoso el caso de Save more tomorrow que logró que 26 millones de estadounidenses aporten a su cuenta de ahorro para el retiro "sin dolor".
"Ahorrar puede ser difícil, más bien es difícil, pero ahorrar con dolor es imposible. Hay que ahorrarse el dolor", apuntó.
Otro ejemplo de economía del comportamiento es acercar a las personas a su "yo" del futuro, pues suele suceder que no tenemos.