El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reveló en su informe sobre la “Situación Financiera y Riesgos 2014-2015” que existen factores externos -sumados a la transición demográfica y epidemiológica – que presionan el alza de su gasto en la prestación de servicios médicos a la población derechohabiente.
La operación actual de IMSS proyecta que al final de 2015 los ingresos llegarán a 522,129 millones de pesos, mientras que el gasto sería de 524,187 millones de pesos, de acuerdo con el documento.
Esto generaría un déficit de 2,058 millones de pesos antes del incremento de reservas y un déficit de 13,399 millones de pesos después de la acumulación de reservas y Fondo laboral, más 352 millones de pesos por los intereses restringidos de la Reserva de Operación para Contingencias y Financiamiento.
El faltante de 13,757 millones de pesos será cubierto con recursos de la Reserva Financiera y Actuarial del Seguro de Enfermedades y Maternidad tras considerarlos como deficitarios.
El IMSS también dio a conocer que al 31 de diciembre de 2014, el estado de situación financiera del Instituto presentó un activo total de 293,850 millones de pesos, conformado por el activo circulante y el activo no circulante.
De igual forma, reportó que los ingresos de operación del ejercicio 2014 ascendieron a 332,227 millones de pesos. Por su parte, el gasto de operación fue de 331,955 millones de pesos.
Durante más de una década el IMSS registró un incremento de más de 70% real en el gasto, además que la proporción de los recursos que se destinan al pago de la nómina de personal activo registró una disminución.
El IMSS resaltó en el documento que “los resultados obtenidos en 2014 y proyectados para el corto plazo mejoran las expectativas de suficiencia financiera para el Instituto, comparada con la que se mostró en Informes anteriores”.
Situación
La dependencia resaltó que atraviesa una “transición epidemiológica” hacia una mayor prevalencia de enfermedades crónico-degenerativas no transmisibles que representan la mayor carga de enfermedad medida por los años de vida saludables perdidos ajustados por discapacidad.
“El IMSS, está enfrentando dos grandes retos: una profunda transición demográfica y un cambio en el perfil epidemiológico, lo que se traduce en un creciente gasto en salud”, explicó en el informe.