Aun cuando se logren los objetivos planteados en el Presupuesto de Egresos para 2017, las presiones seguirán por algún tiempo, toda vez que además de una necesidad constante de mayores ingresos, las presiones sobre el gasto seguirán latentes, aseguró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su publicación semanal “Análisis económico ejecutivo”, precisó que el gasto público creció en los últimos años, por lo que se insistió en que habría que reducirlo para evitar un mayor aumento en la deuda del país.
“Lograr ajustar el gasto público se ha hecho una tarea para las autoridades que cada vez se complica más, si se considera que el margen de acción para hacerlo es prácticamente nulo”.
Durante los primeros cuatro meses del año, las finanzas públicas mostraron un desempeño favorable, tan solo el gasto resultó 2.3% inferior en términos reales respecto al mismo periodo del año pasado y 41.1 mil millones de pesos menor a lo que se había programado para ese lapso, sin embargo esto no es suficiente.
En principio es fundamental consolidar fuentes de ingresos permanentes y dejar de depender de los ingresos no recurrentes, y además la prioridad debe ser un mayor énfasis en la mejor asignación y eficiencia del gasto.
El CEESP apuntó que México cuenta con instrumentos para ello, como la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y la Ley de Coordinación Fiscal, pero se requiere de apoyo adicional.
En este caso, existen diversas instancias internas y externas que dan seguimiento al gasto del sector público, pero ninguna con la suficiente fuerza, consideró.
