Antes de entregar o reproducir los datos de la identificación, es necesario conocer las implicaciones de los receptores
Para disminuir los riesgos en el manejo datos personales derivados del uso de la credencial para votar, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) emitió una serie de recomendaciones para su adecuado manejo.
DATOS PERSONALES, ¿VULNERABLES ANTE LA “REVICTIMIZACIÓN”?
En un comunicado, el organismo señaló que en México existen 88 millones 875,266 ciudadanos con este documento, por lo que los funcionarios públicos que reciben este medio de identificación asumen responsabilidades administrativas y legales, pues se trata de un volumen importante de información (nombre completo, dirección, fecha de nacimiento, firma, fotografía, huella digital, CURP y clave del elector).
“Tanto servidores públicos como personas responsables de tratar esta información, que con un descuido o –peor aún—dolo en el manejo de esta información, puede generar responsabilidades legales”, sostuvo el organismo.
Ante ello, exhortó a:
- solicitar la credencial para votar solo en casos estrictamente necesarios, “pues cuantos más datos personales están en juego, más riegos se enfrentan”
- entregar identificaciones laborales o académicas para accesos
- en caso de tener que registrar datos de la credencial, solo registrar algunos datos
- resguardar las fotocopias o reproducciones de la credencial de forma segura
- eliminar los archivos y bases de datos que contengan la credencial una vez que se cumplió el propósito de su solicitud, y
- antes de identificar a los titulares, se deben conocer las “Guías” de tratamiento en la sección de “Protección de Datos Personales”
