El organismo empresarial lamentó que las organizaciones tengan que presionar con bloqueos a las autoridades para obtener recursos
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín, celebró que el gobierno federal no haya cedido a las presiones de organizaciones campesinas, que exigieron dinero del erario para evitar el bloqueo en la Cámara de Diputados.
Al participar en la inauguración de Creo MX, evento que busca impulsar a emprendedores y Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), dijo que en estos momentos es importante que el Congreso sesione para la asignación del gasto del próximo año, por ello, el gobierno "no puede permitirse chantajes".
De ahí que consideró positivo “que el gobierno no esté repartiendo dinero para arreglar los problemas”.
El representante empresarial lamentó que las organizaciones tengan que presionar con bloqueos a las autoridades para obtener recursos.
Respecto a las inversiones que dio a conocer la Secretaría de Economía (SE), con crecimiento de 7.8 por ciento, aseguró que la llegada de capital extranjero “es muy positiva”, pues eso muestra “que los extranjeros están viendo, lo que el Consejo Coordinador vemos, que México es un país de oportunidades”.
Aseguró que hay condiciones para que México siga creciendo: “debemos quitarnos de tanto encono y enfocarnos en hacerlo crecer”.
Para ello, indicó, se deben combatir problemas importantes como la inseguridad, pero sabemos que el gobierno está implementando una nueva estrategia y “debemos darle tiempo y nosotros como sociedad apoyarlo”.
En otro tema, el dirigente del CCE lamentó que sean los tribunales los que decidan si es viable o no las modificaciones al otorgamiento de Certificados para Energía Limpia (CEL) que decretó la Secretaría de Energía (Sener).
Lo anterior, luego de los seis amparos interpuestos contra esta medida y ante la negativa de la titular de la Sener, Rocio Nahle, de respetar las condiciones pactadas para este sector, lo cual, dijo, desalienta la inversión.
En contraste, el dirigente empresarial reconoció que “este es el momento de armar revoluciones. Una revolución de emprendedores, donde los jóvenes pueden empezar a encontrar nuevas oportunidades”.
