Rusia y China han sido señaladas por Bruselas por participar en la difusión de información errónea con el fin de polarizar a la sociedad. Agentes extranjeros y países como estos han participado en operaciones de influencia selectivas y campañas de desinformación sobre el COVID-19 en la Unión Europea, sostiene la Comisión Europea.
En un informe presentado a inicios de junio, la Comisión y el alto representante evalúan las medidas para combatir la desinformación sobre la pandemia después de que los líderes europeos lo solicitaran desde marzo pasado.
Pese a que el señalamiento puede resultar impreciso, es destacable después de que ese departamento fuera acusado de archivar acusación de una supuesta desinformación por parte de China.
La oficina se ha mostrado también a favor de las medidas que redes sociales como Twitter han implementado contra ciertos políticos, como el caso con el presidente estadounidense Donald Trump, ya que afirman que las mentiras de las políticas tienen un impacto inmediato.
Bruselas ha colaborado en otras ocasiones con empresas como Facebook, Google o Mozilla para luchar contra la desinformación, ya que estas junto con Twitter firmaron en octubre de 2018 el Código de Buenas Prácticas para autorregularse en el combate contra la desinformación.
