La Cámara de Diputados de Oaxaca aprobó una medida donde a los menores de edad se les prohíbe la venta de refrescos y alimentos conocidos como “chatarra”, lo cual ha generado reacciones en contra por parte de la industria.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) reiteró que México requiere contar con una política pública integral de salud donde se incentive la actividad física, pues "calificar alimentos como buenos o malos o recurrir a prohibiciones, no es la solución".
El CCE dijo en un comunicado que "lamentaron la falta de apertura o disposición al diálogo de los legisladores locales que aprobaron la normativa sin tener en cuenta a las partes afectadas."
Esta medida, asegura la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), propiciará la caída de ventas de al menos 58,000 pequeños comercios (tiendas de abarrotes, taquerías, fondas, antojerías, locatarios de la central de abastos), muchos cerrarán sus puertas y perderán su modus vivendi. Por otra parte, los consumidores sufrirán desabasto y especulación de precios, viendo más afectados sus bolsillos y monederos.
La ANPEC exhortó al gobernador Alejandro Murat a vetar esta Ley que causará mayor dolor y pobreza a la población de nuestro querido Oaxaca.
Ante esto, Grupo Monex refirió que "consideran "que la noticia podría generar efectos en el Sector, recordando que recientemente los resultados al segundo trimestre del 2020 validaban una clara desaceleración en el Volumen, principalmente por los efectos de confinamiento y las limitantes que se presentó el consumo en el periodo".
Cabe mencionar que en la actualidad México es el país número uno en consumo de refresco y de bebidas azucaradas. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha comentado que en promedio un mexicano consume 163 litros de refresco al año.
