De acuerdo con el Monitor de Tendencias de Inversión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), en 2023, México resaltó como uno de los países más dinámicos como receptor de inversión extranjera directa (IED), lo cual podría generar optimismo por parte de las autoridades, sin embargo, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advirtió que debemos ser cautelosos con estos datos.
A detalle, el documento señaló que durante ese año la IED hacia México creció 21%, es decir, recibió aproximadamente 43,900 millones de dólares (md), esto comparado con la cifra actualizada del año previo. Sin embargo, si esta cifra se compara con la preliminar reportada por la Secretaría de Economía para 2022, su incremento podría haber sido de 24%.
El CEESP indicó que si bien la cifra es favorable, se debe tener en cuenta que existe más de una forma de apreciar su comportamiento anual.
Explicó que la práctica de la Secretaría de Economía es comparar las cifras preliminares del periodo con sus similares del año previo. Ello es razonable, toda vez que estas típicamente se ajustan al alza durante los siguientes doce trimestres hasta poder considerarse definitivas.
Lo anterior quiere decir que la IED de los primeros tres trimestres del 2023 superó en 30% al monto preliminar registrado en el mismo lapso del 2022, que fue de 25,275 md. Si se considera la base revisada de 2022, el monto de IED de los tres primeros trimestres de 2023 fue 4.6% menor a la de un año antes, 34,498 mdd.
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¿Qué tan acertadas son las cifras de IED?
El CEESP destacó que la IED no equivale, en su momento de registro, a formación de capital productivo, aunque sí puede incluirla parcialmente. La IED se integra por 3 componentes: reinversión de utilidades, cuentas entre compañías y nuevas inversiones. Quizá en este último rubro es más probable que pueda estar lo que aumente de manera inmediata el acervo de capital productivo del país.
Los resultados de los primeros tres trimestres del 2023 indican que el origen principal de la IED fue la reinversión de utilidades, que sumó 24,905 md y representó el 76% del total. Por su parte, las cuentas entre compañías reportaron 5,215 md, 16% del total. En conjunto éstas dos representaron un incremento anual de 71%. No obstante, en lo inmediato estos rubros no significan más capital para la producción. Por ahora, el 92% de la IED representó solo operaciones financieras.
Las expectativas sobre las nuevas inversiones apoyadas en el proceso de relocalización y el aumento en los anuncios de nuevos proyectos greenfield son favorables. Pero por el momento no es claro que los elevados niveles de la IED impliquen incrementos del acervo de capital productivo.
La IED preliminar en nuevas inversiones en el lapso enero-septiembre del 2023 reportaron una caída de 63.3% respecto a su similar del año previo, sin considerar operaciones extraordinarias de 2022.
Por lo anterior, concluyó que no hay duda de que la llegada de IED es una gran oportunidad para México ante la relocalización, en especial las nuevas inversiones destinadas a la formación de capital productivo. México podría recibir montos más grandes de IED si lograra fortalecer el Estado de derecho y la seguridad física y patrimonial en el corto y mediano plazos. El nuevo gobierno tendría mayores flujos de IED si logra atender esos temas fundamentales.
