Causó una reducción de 6% en el consumo de bebidas gravadas y un aumento de 4% en el de agua purificada
A diferencia de impuestos como el IVA o el ISR, que tienen una función meramente recaudatoria, el IESPS también tiene un propósito, el de desincentivar el consumo de ciertos productos, como alimentos altos en calorías, bebidas endulzadas o tabaco.
Al respecto, el jefe de la Unidad de Política de Ingresos Tributarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Francisco Javier Arias Vázquez, explicó que este gravamen proviene de el economista Arthur C. Pigou quién propuso un gravamen (conocido como impuesto Pigouviano) para solucionar el problema de las externalidades, por ejemplo, la contaminación causada por una empresa en un río.
“Nuestro país es pionero en el uso de IEPS en alimentos chatarra y refrescos, con el objetivo de incentivar una dieta que implique menos riesgos en términos de obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares”, señaló.
En ese sentido, refirió que México es el segundo con mayor prevalencia de obesidad entre las naciones miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), solo detrás de Estados Unidos; además, está entre los primeros 10 lugares del organismo en obesidad en niños.
Al tiempo, cuenta con la mayor prevalencia de diabetes, lo que muchas veces está ligado al indicador anterior de obesidad e ingesta de azúcares en cuanto a patrones de consumo, pero la compra de tabaco en el país es relativamente baja respecto a otras economías del mundo.
Al respecto, aseveró que el IESPS en refrescos ha sido exitoso en su objetivo de reducir el consumo de estos productos, mientras que se incrementó el de agua embotellada sin sabor ni edulcorantes.
Según un estudio citado por Arias Vázquez, el IEPS causó una reducción de 6% en el consumo de bebidas gravadas y un aumento de 4% en el de agua purificada.
Agregó que otra forma de medir la efectividad de este impuesto es observando los cambios en la ingesta de calorías de los ciudadanos.
“El IEPS redujo la brecha de consumo calórico entre los individuos con sobrepeso y los saludables en 7.1%, y para quienes padecen obesidad respecto a los que tienen sobrepeso en 5.6%.", concluyó.
