El empleo tuvo uno de sus mejores años en la historia económica reciente gracias al efecto de una mayor normalidad tras varios meses de confinamientos
Las cifras de desempleo registraron un nuevo descenso de la tasa de desocupación, desde 2.85% hasta 2.76%, con lo que alcanza un mínimo nunca antes visto en todo el reporte del indicador, que data de 2005.
No obstante, de acuerdo con Monex, hay que tener cierta cautela en la interpretación del dato, pues la disminución se da a partir de una pérdida significativa en la Población Económicamente Activa, que pasó de 60.81% del total de la población de 15 años y más a 59.69%. Esta es la baja más pronunciada desde que se desatara la pandemia de Covid en abril de 2020 e implica también una caída en el empleo.
De hecho, la Población Ocupada se redujo en 912,000 personas y, aunque en parte se debe a los despidos de temporada tras las semanas de ventas intensivas por las promociones del Buen Fin, la cifra es más alta que en años anteriores, pudiendo estar relacionada tanto al nuevo repunte de infecciones, como a las complicaciones económicas que se viven.
A detalle, los 3 grandes sectores de la economía tuvieron pérdidas netas en el empleo, pero fue el terciario (-690 mil puestos laborales) el que más contribuyó al descenso en las estadísticas globales. Aunque, como suele pasar entre diciembre y enero, el sector comercial tuvo recortes importantes (-464 mil en 2022), llama la atención la caída en el empleo de servicios sociales -247 mil, que incluyen una amplia gama de actividades -desde el cuidado al entretenimiento-, pues estos suelen incrementarse en esta parte del año. Además, las manufacturas también tuvieron una contracción relevante (-204 mil), lo que advierte de dificultades en la industria y refuerza nuestra cautela ante la baja en la tasa de desempleo.
Incluso, con cifras ajustadas por estacionalidad la tasa de desocupación se mantuvo estática (3.01%), pero la Población Económicamente Activa si descendió (de 60.26% a 59.92%), lo que en los hechos sugiere un ligero deterioro en el mercado laboral.
"A pesar de ello, la perspectiva global de 2022 es destacadísima y el empleo tuvo uno de sus mejores años en la historia económica reciente gracias al efecto de una mayor normalidad tras varios meses de confinamientos, la fortaleza de la demanda y algunos de los nuevos programas sociales, que sesgan los registros al alza. Hacia adelante, el panorama luce retador, pero los avances conseguidos constituyen un paso significativo en el proceso de recuperación económica", concluyó la firma.
