Lo ideal sería que cuando llegue el retiro laboral los trabajadores cuenten con los ahorros suficientes o una pensión para vivir tranquilo; sin embargo, para lograr esto es importante realizar un plan que garantice los recursos necesarios, destacó la Condusef.
Un ejemplo de ello, es cuando el trabajador que tiene un trabajo formal realiza ahorros para su retiro cada mes por ley; además de que la entidad en la que labora y el gobierno de igual forma realizan aportaciones, mismas que son depositadas en la cuenta individual administrada e invertida por una Afore con el fin de incrementar su valor a través de los años.
Cabe señalar que los trabajadores subordinados e independientes pueden elegir una administradora que tenga un buen desempeño y ofrezca mayores rendimientos netos sobre sus recursos; mientras que realizan aportaciones voluntarias que incrementen el saldo.
Finalmente, la Condusef refirió que una encuesta del 28% de los adultos mayores depende económicamente de alguna persona, siendo sus hijos el principal apoyo financiero (77%).
