Qué ocurre si un trabajador omite elegir una Afore

A continuación se da a conocer qué sucede con las aportaciones que se realizan a la cuenta individual de un asegurado que desatiende su derecho

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 .  (Foto: iStock)

Cuando una persona ingresa al mundo laboral, debe elegir la Administradora de Fondo para el Retiro —Afore— que será la encargada de administrar su cuenta individual en la cual se depositarán las cuotas obrero-patronales por concepto del Seguro de Retiro, Cesantía en Edad Avanzada y Vejez, sus rendimientos, las aportaciones estatales y de vivienda, así como los demás recursos que puedan ser aportados voluntariamente (arts. 159, fracc. I, LSS; 3o., fracc. III BIS, Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro —LSAR—). 

De ahí que a continuación se dé a conocer qué sucede con las aportaciones que se realizan a la cuenta individual de un asegurado que desatiende su derecho y obligación de elegir su Afore.

Las cuentas individuales de los trabajadores omisos que reciban cuotas y aportaciones durante al menos seis bimestres consecutivos, son asignadas a las Afore registradas con mayor rendimiento neto. Ese proceso de asignación se realiza una vez al año conforme al calendario determinado por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro —Consar—mediante disposiciones de carácter general (arts. 76, primer párrafo de la LSAR y 52 Reglamento de la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro —RLSAR—). 

Cuando a una Afore se le asigne una cuenta individual, esta debe localizar y registrar a los trabajadores titulares en un plazo de máximo dos años; en caso contrario, si dichas cuentas permanecen durante dos años en la Administradora asignada y el colaborador no solicita su registro en la Afore de su elección, caduca la asignación de su cuenta y esta es reasignada nuevamente (arts. 76, tercer párrafo, LSAR y 53, tercer párrafo, RLSAR). 

La asignación y reasignación permiten que los recursos para el retiro se mantengan en constante crecimiento, pese al desinterés del trabajador titular de la cuenta individual.

No obstante, no elegir una Afore implica para el colaborador algunos inconvenientes como, que:

  • su cuenta de ahorro no contenga sus datos de identificación (Clave Única de Registro de Población —CURP— y RFC), los cuales son necesarios para tramitar una pensión, realizar retiro de recursos o solicitar un crédito de vivienda
  • su Afore no:
  • tenga actualizados sus datos de contacto (domicilio, correo electrónico o teléfono), por lo que no podrá tener todos los servicios que su administradora ofrece, como la atención personalizada a través de sus diferentes canales de contacto, y
  • le envíe cuatrimestralmente su estado de cuenta a su domicilio o correo electrónico registrados, y
  • no pueda realizar aportaciones voluntarias en su cuenta, que le permitan acceder a rendimientos competitivos que le ayuden a incrementar su patrimonio y generar así mayor ahorro para su retiro

De ahí que, es importante que todo trabajador elija la Afore que cuidará de su ahorro, de acuerdo con su conveniencia y criterio individual.