La reforma originalmente propuesta por el sector privado contenía importantes medidas que no representaban un costo fiscal para el gobierno y permitían alcanzar mejores niveles de inclusión social (pensiones para profesionales independientes), equidad de género y ahorro voluntario para los trabajadores, desafortunadamente estos elementos no fueron tomados en cuenta en la redacción final de la reforma y quedarán como pendiente en el compromiso por mejorar continuamente las pensiones de los mexicanos, advirtió la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore)
Por su parte, el Consejo Coordinador Empresarial denunció que la iniciativa incorporó el tope a las comisiones que pueden cobrar las Afores sin consensarlo antes con la iniciativa privada, lo que consideran conlleva distorsiones que perjudican la competencia y, en última instancia, a los trabajadores, al ser una política de control de precios.
Además, aseveró la reducción en las comisiones de las Afores no tiene un efecto significativo en la pensión del trabajador, "para ello, sería más efectivo generar mecanismos y condiciones para que las administradoras inviertan el dinero ahorrado en proyectos prioritarios de infraestructura, que generen mejores rendimientos, y por ende un mayor efecto positivo sobre las pensiones".
Al respecto, Amafore destacó que las administradoras están comprometidas con la disminución progresiva de las comisiones, sin embargo, lo aprobado por los legisladores transgrede la legalidad en materia de competencia y los tratados internacionales que protegen la inversión en México.
A pesar de lo anterior, ambos organismos reconocieron que la aprobación de la reforma a la Ley del del Seguro Social cumple el pago de una deuda histórica con las y los trabajadores y confirma que el Sistema de Ahorro para el Retiro es el mecanismo idóneo para administrar su ahorro, así como para garantizar el financiamiento responsable que coadyuve al desarrollo nacional.
Explicaron que permitirá que más trabajadores mexicanos cuenten con mejores pensiones. Adicionalmente, da la certidumbre de que sus ahorros continuarán siendo administrados de forma responsable y profesional. La aportación obligatoria para el retiro pasará gradualmente del 6.5% al 15% del salario base de cotización y este incremento será aportado en su mayoría por los patrones.
Entre otras cosas, la nueva legislación contempla que la cuota que aporta el patrón por cada trabajador, se aumentará gradualmente a partir de 2023 y durante un lapso de 8 años. El ahorro total pasará de 6.5% a 15%. El trabajador no aportará ni un centavo más.
Asimismo, las semanas de cotización necesarias para jubilarse, una vez alcanzada la edad correspondiente, pasan de 1,250 a un nuevo esquema que inicia con 750 en 2021 y aumenta en un periodo de 10 años para terminar en 1,000 semanas. Es decir, en vez de necesitarse 25 años de cotización, se necesitarán inicialmente 15. Asimismo, los trabajadores que no alcancen las condiciones de pensión mínima garantizada, podrán tener también, acceso a una pensión con base en el ahorro acumulado en sus cuentas individuales.
