Desde la aparición del COVID-19, la disminución de las actividades ha impactado negativamente a los empleados que laboran en la modalidad de teletrabajo. Es así como en esta época de sedentarismo, ciertos factores pueden provocar percances que incluso se califiquen como riesgos laborales —accidentes y las enfermedades a que están expuestos los asegurados en ejercicio o con motivo del trabajo— (art. 42, LSS).
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Dentro de los ambientes laborales, existen agentes y factores de riesgo que pueden desencadenar un accidente o una enfermedad de trabajo; los cuales, por la falta de actividad, tienen diversas consecuencias. Por ejemplo, los esguinces; afectando a las articulaciones de tobillo, rodilla, codo, muñeca y pulgar.
Por lo que es necesario para el empleador considere que tan conveniente es retornar a las instalaciones, seguir utilizando el esquema de teletrabajo o implementar modelos híbridos para evitar siniestros en su plantilla laboral.
A continuación, se dan a conocer los factores ergonómicos que se encuentran presentes de forma importante y que pueden provocar este tipo de lesiones, de acuerdo con lo expuesto en el curso “Esguince de tobillo y muñeca” del IMSS:
Teletrabajo
- Movimientos repetitivos. Son movimientos que se realizan reiterativamente en corto tiempo, que provocan pequeñas lesiones en las articulaciones que con el tiempo se hacen crónicas o dan lugar a un daño permanente, y
- posturas forzadas. Laborar con posturas inadecuadas es también una fuente de lesiones musculoesqueléticas, tanto si se trata de posturas incómodas que sobrecargan una parte del cuerpo como si el trabajo obliga a mantener una misma postura todo el tiempo. Los brazos, el cuello, la espalda y las piernas suelen ser las zonas más castigadas por problemas posturales. Eliminar posturas forzadas, realizar pausas, y poder cambiar de postura de vez en cuando reduce el riesgo considerablemente
Centro laboral
El factor de riesgo que más impacta son las cargas, porque estas se encuentran presentes en cualquier tarea o actividad que implique un esfuerzo al cargar, levantar, descender, transportar o empujar objetos pesados. Manejar las cargas inadecuadamente ocasiona, en gran medida, accidentes de trabajo.
Es importante que si los subordinados están expuestos a este tipo de actividades se les debe capacitar en las técnicas de manejo seguro de cargas y eliminar o disminuir este manejo manual de cargas.
Sin embargo, las posturas forzadas y los movimientos repetitivos también pueden aquejar a los trabajadores que acuden a las instalaciones del patrón.
Como se observa, es importante que el patrón que utilice el teletrabajo o modelos híbridos (algunos días en casa y en el centro laboral), tome en cuenta los factores que pueden causar un riesgo laboral y se hagan de la opinión y el estudio de expertos sobre ergonomía para que se encarguen de analizar los aspectos a considerar para la prevención de problemas de esta naturaleza, según el lugar donde se preste el servicio.
Además, es importante conocer qué implicaciones tiene retornar a las instalaciones, por lo que se sugiere la lectura del tema “2022, el reto de regresar al lugar de trabajo”, disponible en nuestra edición electrónica número 502 del 31 de enero de 2022, en la sección de Laboral.
