Los contrapesos que existen al interior de Estados Unidos y que cada vez son más visibles serán un obstáculo para que el presidente Donald Trump pueda imponer aranceles a México, consideró Martín Íñiguez, profesor de la Universidad Panamericana.
“Existen contrapesos políticos, económicos, culturales y hasta religiosos que se oponen a las medidas que él quiere tomar para reelegirse en Estados Unidos, tomando como su bandera el tema de la migración y utilizando como chivo expiatorio a México”, dijo a Notimex el catedrático.
Indicó que entre las principales pruebas se encuentran las declaraciones de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien además “es una de nuestras principales aliadas”, al ser consciente de que los aranceles afectarían a ambos países.
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“El Partido Demócrata y un sector del Partido Republicano están también en favor de cerrar ya el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y que se le ven muchas posibilidades de cerrar antes de que acabe el semestre”, comentó el especialista del Departamento de Historia.
Señaló por otro lado que se encuentra la Cámara de Comercio de Estados Unidos, empresarios e incluso la propia Iglesia Católica, donde “todos se han opuesto a este tipo de medidas derivado de que obviamente va a ser una afectación no solamente para México, sino también para el propio comercio norteamericano tras una represalia”.
“La moneda está en el aire, pero estamos seguros en un 70 y 80% de que no va a pasar nada y que sólo es una medida de presión para el gobierno mexicano derivado de que Trump necesita mantener votos para su reelección”, reiteró.
Expuso que el que Donald Trump quiera poner del 5.0 al 25% de aranceles a los productos mexicanos por un tema que no tiene nada qué ver con lo comercial, como es el migratorio, rompe las reglas de la Organización Mundial del Comercio y del mismo Tratado de Libre Comercio, “es ilegal”.
