Con el sismo de 7.1 grados del pasado 19 de septiembre en México, la actividad económica se detuvo parcialmente a razón de los trabajos de rescate; sin embargo, los expertos esperan que esta pausa termine e inicie un periodo de impulso financiero al momento en que comience la reconstrucción.
El economista del Banco Santander, Rafael Camarena, explicó que “habrá un impacto de muy corto plazo y en general las actividades económicas van regresando a la normalidad", por lo que estimó un crecimiento del PIB en este año del 2.5%.
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Paralelamente a ello, Presidente Enrique Peña Nieto comentó que el gobierno "otorgará apoyos para reactivar actividades económicas (…) y créditos especiales en condiciones favorables para reponer o reparar viviendas dañadas".
Cabe señalar que según estimaciones de Citibanamex, durante los primeros días posteriores al sismo diversos negocios cercanos a las zonas suspendieron sus actividades, lo que implicó una disminución de aproximadamente 0.35% del PIB únicamente en el tercer trimestre. No obstante, en contrataste con el terremoto de 1985 se tuvo un costo del 2.39% de la economía; es decir, 34,264 millones de dólares, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Reconstrucción
Tras el rescate de las personas afectadas, la restauración del gobierno federal y de las autoridades locales pueden significar un impulso a la economía, ya que "el país se encuentra en una mejor situación que cuando fue el terremoto de 1985", señalaron analistas de Citibanamex.
En un reporte de la firma sobre los fondos gubernamentales disponibles, apuntó que actualmente existen cerca de 9,000 millones de pesos (mdp) en un apartado de desastres y se espera que en 2018 se le asignen otros 6,000 mdp.
Asimismo un reporte de Capital Economics sostuvo que "aunque difícilmente es un consuelo en estos momentos, los esfuerzos de reconstrucción ayudarán a la economía a ganar un poco durante los últimos meses del año", pues a medida de que se inicien los trabajos se aumentará la demanda de materiales y puestos de trabajo en la construcción.
Impacto a la vivienda
El terremoto del 19 de septiembre vigente impactó a la Ciudad de México, el Estado de México, Puebla y Morelos, mismos que en conjunto representan el 25% de la economía ya que concentran el sector servicios y las actividades manufactureras; sin embargo, la mayor afectación fue en las escuelas y viviendas.
Es decir, la infraestructura productiva del país como fábricas y plantas de energía no resultaron afectadas.
"Consideramos que la infraestructura productiva no ha resultado afectada más que en forma marginal y muy localizada, en cambio hay afectaciones significativas en hogares e instalaciones como escuelas", por ello, los expertos estiman que el impacto en el “grueso de la economía es limitado”, finalizó Banco Santander.
