En 2018 México se convirtió en el líder a nivel Latinoamérica en comercio electrónico, con ventas de hasta 13, 700 millones de dólares, de acuerdo con cifras del Índice de Desarrollo de las TIC.
A nivel global, este sector aportó 11.9% del total de ventas y se espera que para 2020 aumente a 13.7%, según datos de un portal de estadísticas e investigación de mercado, mientras que para el año 2021, se estima que 17.5% de las ventas en el sector retail provengan de las compras en línea.
No obstante, que en 2019 el comercio electrónico no solo continuará siendo relevante para las industrias y ventas minoristas, sino que veremos una serie de tendencias que, de acuerdo con expertos, tendrán mayor relevancia a lo largo del año, explicó el director de Ventas Senior en América Latina de Manhattan Associates, Óscar Valero.
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Estas tendencias incluyen ventas a través de dispositivos móviles y en nuestro país 41% de la población cuenta con un celular y se estima que para el 2021 el 50 por ciento de las ventas online será con un dispositivo móvil.
Así como las ventas personalizadas que debido al desarrollo del Big Data permite conocer más a detalle el perfil del consumidor, por lo que es posible realizar estrategias adecuadas para cada persona.
Otra de las estrategias a seguir este año será mejorar la experiencia de compra a través de chatbots y la Inteligencia Artificial, para tener una atención a cliente más eficiente, directa y personal.
Además de la omnicanalidad y la última milla, conceptos enfocados al proceso logístico, que cobrarán más importancia para enriquecer la experiencia de compra; sobre todo, que las empresas sean más eficientes y logren coordinarse por diversos canales hasta que el producto llegue a manos del consumidor.
Agregó que también es importante la ética y sustentabilidad ya que cada vez, el cuidado al medio ambiente y la responsabilidad social serán aspectos en los que los consumidores prestarán atención antes de adquirir un producto.
Finalmente, mencionó que el dropshipping, se trata de un tipo de venta en el que los minoristas no guardan los artículos sino que trasladan el pedido y detalles de envío del cliente a los mayoristas, quienes despachan directamente a la persona. La diferencia entre el precio del mayorista y del minorista, será lo que obtenga de beneficio este último.
